El delegado del Frente Polisario en España, Abdulah Arabi, ha cargado contra "la defensa acérrima" llevada a cabo por el Gobierno de Pedro Sánchez a los planes autonomistas de Marruecos para el Sáhara Occidental, tras la reunión de los ministros de Exteriores de ambos países este jueves en Madrid. En un comunicado publicado en la red social X, Arabi ha expresado su "enérgica" oposición a las afirmaciones del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, quien ha vuelto a certificar el giro de la postura tradicional española sobre el conflicto político y territorial del Sáhara.

En una reunión con su homólogo marroquí, Nasser Bourita, Albares ha reiterado que el plan marroquí de una autonomía "es la base más seria, realista y creíble" para el conflicto. El ministro de Exteriores español ha asegurado en una declaración conjunta que la posición expresada por España con respecto al Sáhara el 7 de abril de 2022 reconoce los esfuerzos "serios y creíbles" de Marruecos en el marco de las Naciones Unidas para encontrar una solución "mutuamente aceptable". Unas palabras que el delegado del Frente Polisario ha criticado al considerar que, en todo caso, serían más previsibles de su homólogo marroquí. Bourita, por su parte, ha acusado a quienes piden autodeterminación para el Sáhara de sostener "posturas antiguas" y de querer perpetuar el conflicto 50 años más. Ambos ministros han celebrado el "momento histórico" de buenas relaciones entre España y Marruecos y han destacado los resultados positivos acuerdos para abrir las aduanas y para el control migratorio.

En opinión de Arabi, la política de promoción y defensa de los derechos humanos que el Gobierno de España publicita choca "de manera directa" con la "defensa acérrima llevada a cabo" por el Ejecutivo de las pretensiones marroquíes sobre el Sáhara Occidental. "Dicha colisión es evidente, por cuanto cualquier propuesta que no respete el derecho a la autodeterminación e independencia del pueblo del Sáhara Occidental es contraria a derecho internacional", ha afirmado. Asimismo, ha asegurado que esta posición es "contraria al sentir de la ciudadanía del Estado español y de todas las fuerzas políticas", a excepción de "la formación política a la cual está adscrito el Ministerio". En este contexto, el delegado del Frente Polisario ha reiterado que seguirá velando porque todas las decisiones que afecten al Sáhara Occidental sean acordes al derecho internacional y garantice la autodeterminación e independencia del pueblo saharaui.

El 20 de marzo se cumplieron tres años de la oficialización del giro diplomático de España con respecto al Sáhara, con una carta de Pedro Sánchez al rey de Marruecos que el Frente Polisario tilda de "ilegal" y que denuncia por "romper con décadas de consenso histórico". El Frente Polisario considera que la postura del Gobierno supone "la subordinación de los derechos inalienables del pueblo saharaui a intereses ajenos, contradiciendo el Derecho Internacional". Y ante el Congreso, el grupo para la autodeterminación del Sáhara Occidental pidió "compromiso con el proceso de descolonización" del territorio" y con "el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación e independencia".

Giro de Sánchez con el contexto migratorio de fondo

El territorio saharaui, antigua colonia española, fue ocupada por Marruecos en 1975 y se produjo una lucha armada que continuó hasta 1991, cuando se acordó un alto el fuego para llegar a un acuerdo de referéndum. Este acuerdo nunca se produjo, por discrepancias con el censo y la inclusión o no de los colonos marroquíes, y la escalada del conflicto político llevó a una ruptura del alto el fuego noviembre de 2020. En el contexto del reto creciente por la migración no regulada en la frontera entre España y Marruecos en Ceuta y Melilla, el gobierno de Pedro Sánchez propició un acercamiento con el Reino de Marruecos para mejorar las relaciones y se ha alejado poco a poco del Sáhara Occidental, cosa que el Frente Polisario ha llegado a calificar de "traición". El delegado del Frente Polisario en España, Abdulah Arabi, afirmó en enero del 2023 que Marruecos utilizaba la inmigración para presionar el Gobierno y que este "cedió a los chantajes". Políticamente, el Frente tiene el apoyo de Sumar, Esquerra Republicana, EH Bildu y el BNG.