Badalona ha conocido hasta cuatro alcaldes desde la celebración de las últimas dos elecciones y, con toda probabilidad, el próximo 8 de noviembre conocerá el quinto: el socialista Rubén Guijarro. Después de que el todavía alcalde de la ciudad, Xavier García Albiol, saliera en los famosos papeles de Pandora, los grupos del PSC, Guanyem Badalona, ERC, los comuns y Junts se han puesto de acuerdo para presentar una moción de censura que convertirá a Guijarro en el quinto alcalde en los últimos seis años.
Nacido en Barcelona en 1982, Guijarro se crio en el barrio badalonés de Llefià, al cual siempre ha estado muy vinculado. "Podríamos decir que es una persona de barrio", indican desde el grupo municipal a ElNacional.cat. Uno de estos vínculos es el equipo de baloncesto del barrio, la Unión Baloncesto Llefià, de donde ha sido jugador, entrenador y directivo.
Rubén Guijarro es licenciado en Ciencias Políticas y de la Administración por la Universidad Pompeu Fabra y tiene un máster en Liderazgo para la Gestión Pública por la UAB, institución de la cual actualmente es profesor. Habla fluidamente el inglés y tiene conocimientos de francés. Aparte de la trayectoria política, Guijarro se ha dedicado al segmento de empresa en una entidad bancaria como especialista.
Negociador y con proyección
Guijarro entró en política, en gran parte, por su rechazo a la guerra de Iraq. Desde el 2007 está vinculado a la política municipal, habiendo trabajado como coordinador del área de deportes en el consistorio con los alcaldes socialistas Maite Arqué y Jordi Serra. En el 2015 pasó a ser concejal y diputado adjunto de Recursos Humanos en la Diputación de Barcelona. También es miembro de la junta de gobierno del ente provincial y secretario de organización y finanzas del PSC en el Barcelonès Nord.
Pieza clave en las negociaciones más importantes que han afectado a la política de Badalona y mano derecha del último alcalde socialista, Àlex Pastor, Guijarro lo relevó al frente del grupo municipal después del escándalo que protagonizó el exalcalde al saltarse el confinamiento, conducir bebido y agredir a un agente de los Mossos d'Esquadra.
Apasionado de la lectura, las series de televisión y el deporte, desde el PSC de Badalona resaltan la capacidad negociadora de Guijarro, la cual necesitará teniendo en cuenta el gobierno multicolor que encabezará. A pesar del compromiso que aseguran que tiene con la ciudad y la incógnita de que pasará en los próximos meses y en el 2023, cuando los badaloneses vuelven a estar llamados a votar, desde la formación también destacan la proyección política que tiene el futuro alcalde, que lo podría impulsar al Parlament o al Congreso de los Diputados.
Neutralidad institucional
Precisamente, sobre el hecho de que tres de los cinco partidos que dan apoyo a la moción sean independentistas, desde el grupo municipal recuerdan que Guijarro no lo es y que mantendrá en todo momento la "neutralidad política".
Así lo reiteró el mismo Guijarro en la presentación que del futuro gobierno que se hizo este pasado jueves en el Museo de Badalona, donde también rehuyó aclarar si está descartado que Guanyem entre en el gobierno o si los partidos que han firmado el pacto reeditarán el ejecutivo tras las elecciones de 2023 si los números dan.