La diputada y portavoz de la CUP en el Parlament, Anna Gabriel, ha sido la responsable de defender la Resolución de la Ruptura en el plenario de esta mañana. La diputada cupera ha definido el documento como una muestra de la "unidad de acción práctica" y un ejemplo de la voluntad de dejar atrás "la Catalunya subordinada, autonómica, la de los recortes y la de la corrupción. Es un primer paso hacia la república catalana".
Gabriel ha defendido con firmeza el contenido social del proceso soberanista con un cierto tono de revolución gramsciana: "Nunca más un país sin su gente, se acabó el tiempo de las élites; sólo pedimos libertad, justicia y democracia. "No es ningúna declaración unilateral de independencia, no todavía, pero sí es un acto de dignidad y de ruptura con la legalidad hecha búnker que impone el Estado español", ha remachado.
La diputada, que se ha despedido con un "¡Salut y República!" ha puesto deberes a los firmantes de la resolución: no cerrar el documento a ninguna institución, sumar mayorías pero no convertirlas en adhesión pasiva, sino en sujetos activos de un proceso constituyente hacia la nueva República.