El nombre de Francisco José Gan Pampols era desconocido para todo el mundo hasta hace 15 días, cuando el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, lo nombró vicepresidente para la recuperación económica y social después de la terrible DANA que devastó el País Valencià. Pampols es un teniente general retirado, miembro del ejército del suelo y nacido en Figueres. Su fichaje fue muy polémico pero más polémica es la última incorporación de Pampols a su equipo.

El vicepresidente para la reconstrucción ha fichado a un hombre fuerte del PP de Eduardo Zaplana, Vicente Ferrer, un político que también tiene pasado militar. Ferrer fue teniente de Infantería y reservista de las Fuerzas Armadas, pero lo que realmente llama la atención de esta incorporación es su encontronazo con la justicia. Ferrer fue pillado, mientras era diputado en el Congreso, conduciendo bajo los efectos del alcohol y le retiraron el carnet de conducir durante 8 meses.

¿Quién es Vicente Ferrer?

El valenciano Vicente Ferrer es un abogado y político militante del Partido Popular (PP), ha sido vicepresidente de la Diputación de València senador designado por el País Valencià de 1995 en el 2003 y diputado en el Congreso. Ferrer fue portavoz de la Comisión de Defensa desde el 17 de enero de 2012 hasta el 27 de octubre de 2015. Fue precisamente en esta época de portavoz cuando el 30 de septiembre del 2012 fue pillado conduciendo de forma temeraria por la avenida Llevant de València, iba haciendo zigzag y cambiándose de carril cuando la policía local lo paró.

El Tribunal Supremo acordó para él una multa de 720 euros y la retirada del carnet de conducir durante ocho meses por conducir ebrio. Es más, Ferrer ocultó su condición de aforado cuando compareció ante la justicia valenciana. El día de los hechos, cuando la policía le hizo la prueba de alcoholemia, dio 0,82 y 0,84 miligramos de alcohol por litro aspirado de aire, que es el triple de la tasa permitida. En el proceso, Ferrer reconoció los hechos y pactó una condena de conformidad. "Me reuní con unos amigos de la Universidad a comer una paella y ya se sabe qué pasa: empezamos a la una y acabamos a las ocho y tomé la decisión errónea de coger el coche", dijo Ferrer entonces, que también se disculpó: "Fue un error torpe, muy torpe".

El proceso fue largo porque Ferrer, cuando estaba en el juzgado de guardia, no indicó que era diputado del Congreso, y cuando eso se descubrió el juzgado de guardia tuvo que declarar la nulidad de las actuaciones, le devolvió el permiso de conducir y canceló la anotación de los antecedentes penales, y elevó una exposición razonada al Tribunal Supremo, el cual resolvió casi un año después de los hechos (en junio de 2013) con los 8 meses sin carné.