Xavier García Albiol ha evitado una ocupación en Badalona, según ha explicado él mismo a las redes sociales. "No me marcharé hasta que se marchen", dice en el vídeo que ha compartido este lunes. Los hechos han tenido lugar en el barrio del Gorg, donde unas personas querían ocupar un local y un grupo de vecinos los regañaba. El alcalde ha aparecido para rebajar tensiones y ha dado su palabra que "saldrán de aquí".

"Yo de aquí no me marcharé hasta que esta gente no salga", dice, antes de entrar en el local para "hablar con ellos" y conseguir que se vayan. "Saldrán seguro", añade. Acto seguido, García Albiol entra por la puerta entre aplausos de vecinos y se dispone a hablar con las personas, en un espacio vacío. Es imposible distinguir qué hablan, pero sí como tres chicos abandonan el local después de la conversa. "De acuerdo. Resuelto el problema", exclama al alcalde, para volver a ser aplaudido por una veintena de vecinos.

Una vez ha evitado la ocupación, Albiol vuelve a entrar y ve qué habían querido hacer las personas que iban a ocupar con la electricidad. "Esto son profesionales", comenta, después de ver las conexiones que habían hecho en la caja. "Bien, pues ya lo habéis visto. Una ocupación más, una ocupación bien resuelta, gracias también a los vecinos", concluye, antes de enganchar con otro discurso sobre la ocupación: "Este país es una puñetera vergüenza respecto a la ocupación. Lo que pasa aquí no pasa en ningún país de Europa. Tenemos una ley que protege a los okupas ante de los vecinos y los propietarios. Pero en Badalona lo tenemos muy claro, tenemos la concejalía contra la ocupación ilegal, tenemos voluntad y las ideas muy claras de luchar contra esta lacra. Seguimos. Contento con que los vecinos nos hayan llamado enseguida, es una garantía de confianza. A seguir, que por desgracia sigue habiendo ocupaciones, pero en Badalona hay datos que más del 50% de las ocupaciones que se producen las conseguimos parar. Este es el objetivo. Seguiremos en esta línea".

Hace pocos días, Albiol ya envió una carta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para que visitara la ciudad y conociera "de primera mano la grave problemática de la ocupación ilegal de pisos y locales". "La realidad que vivimos en Badalona —y me consta que también en muchas otras ciudades— no concuerda con sus declaraciones", manifestó.

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