Inmigración e inseguridad. Esta ha sido la base del discurso de Ignacio Garriga, líder de Vox en Catalunya, en su intervención durante el debate de política general celebrado en el Parlamento, donde ha vuelto a relacionar, como acostumbra a hacer su formación de ultraderecha, la inmigración con los problemas de seguridad que sufre el país."Usted no quiere solucionar la inseguridad. Con más Mossos cree que se solucionará el problema. Si siguen importando delincuentes, el problema no se resolverá. Se tienen que acabar las ayudas y priorizar a los catalanes y que dejar de pactar con el PP regularizaciones masivas para que los catalanes puedan vivir tranquilos", ha manifestado Garriga desde el atril del Parlament, aprovechando como siempre para marcar perfil con respecto a los populares, que ante el crecimiento de la ultraderecha también han radicalizado su discurso contra la inmigración.

La inmigración, la obsesión de Vox

Así, Garriga ha culpado a Illa y los anteriores gobiernos de la Generalitat de haber convertido Catalunya en la "región más insegura y degrada" de toda España, insistiendo a relacionar a los extranjeros con los delitos: "El 90% de los violadores son extranjeros", ha asegurado al político ultra, entre otros datos. Esta cifra, sin embargo, es falsa, según los datos que aporta el Departamento de Justicia y que se actualizan cada semana. De los 8.411 reclusos penados y pendientes de juicio que hay en las prisiones catalanas, 566 lo son por delitos contra la libertad sexual y, de estos, 311 son extranjeros, es decir, un 55% y no el 91% que ha asegurado a Garriga en sede parlamentaria.

Yendo más allá, ha acusado al presidente Illa de trabajar para conseguir una "Catalunya sin catalanes", indignado con el hecho de que en escuelas catalanas se ofrezcan asignaturas de cultura árabe o de lengua marroquí: "Los catalanes ponen los ahorros y el gobierno marroquí pone a los funcionarios", ha denunciado, asegurando que Illa, lejos de ser parte de la solución es "parte del problema" y una "estafa política" que en lugar de "acabar con el separatismo" ha acabado pactando y convirtiéndose en una "casa común" del independentismo.

Illa se rebela contra Garriga

Ante estas palabras del líder de Vox en Catalunya, Salvador Illa ha asegurado que su objetivo es que su partido "se muera más bien", convencido de que acabará desapareciendo a causa de su discurso. "Es uno de los representantes más nítidos de la oleada reaccionaria, se hacen fotos con Meloni y Orbán", ha señalado el presidente de la Generalitat, tildándolo de Trumpista. Lejos de rechazar esta etiqueta, Garriga la ha abrazado, asegurando que espera una victoria del republicano en las elecciones del 5 de noviembre en los Estados Unidos.

Illa ha denunciado que Garriga insista en vincular la inmigración con la seguridad: "Da datos falsos y engañosos. Hay inmigrantes que delinquen y que son detenidos y encarcelados, igual que una persona no migrante que delinque", sacando pecho del alta cifra de personas recién llegadas que trabajan en el país, la más elevada de todo el Estado. Incluso ha recomendado al líder de Vox, ultracatólico, que lea la Cuarta Carta de San Juan: "El que no ama a su hermano, que ve, no puede amar a Dios, que no ve".