El ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha defendido este lunes el referéndum de autodeterminación en Catalunya como un "elemento útil" del que "echar mano dentro de otras medidas". Ahora bien, bajo su punto de vista, esta no puede ser la única opción, sino que debe complementar un "debate público" que sea "más complejo".
Además, ha valorado que la única forma de solucionar el conflicto catalán es "diálogo y política", lo que, ha matizado, lleva al Gobierno a estudiar todas las opciones, incluyendo el referéndum. "Tenemos que contemplar las vías que permiten que la población sea consultada, sabiendo que es posible que no haya una posición sin matices entre independentistas o centralistas", ha resaltado en una entrevista en Catalunya Ràdio.
Los presos políticos deberían estar libres
Preguntado sobre si la concesión de indultos a los presos políticos sería oportuna de cara a las elecciones del próximo 14 de febrero en Catalunya, Garzón ha valorado que no deberían estar en la cárcel. "Que determinados referentes estén en prisión no ayuda en absoluto, pero el proceso tiene una complejidad adicional", ha puntualizado.
En esta misma línea, el ministro ha indicado que el hecho de que los líderes independentistas estén en prisión dificulta la posibilidad de encontrar una "solución política en las mejores condiciones" al conflicto catalán. Por ello, ha argumentado que mientras los presos políticos estén en la cárcel "no va a haber ninguna solución" en el "ámbito territorial a los problemas de los últimos años".
Sobre la posible reforma de los delitos de sedición y rebelión, Garzón ha expuesto que esta "debería ser viable", aunque ha precisado que la cuestión que está sobre la mesa es cómo convertir "la voluntad política en un elemento técnico, y depende de muchas variables".
Elecciones Catalunya
Ante la posibilidad de aplazar las elecciones catalanas previstas para el 14-F a raíz de la pandemia de coronavirus, Garzón ha asegurado que esta opción, por ahora, no se contempla. No obstante, ha expuesto que ante la actual emergencia sanitaria no se puede descartar ningún escenario.
"No podemos anticiparnos. Estamos acostumbrados a un año que ha sido anormal. Vimos lo que sucedió en las gallegas y las vascas. Este virus cambia en su evolución de manera muy repentina, no podemos tomar decisiones de este calado con tres meses de antelación", ha defendido el ministro.