Siguen saliendo nuevos implicados y pruebas relacionadas con el caso Mediador. Este miércoles se ha hecho público que el general de la Guardia Civil Francisco Espinosa Navas, en prisión desde hace una semana por su presunta implicación en el caso Mediador, guardaba en su domicilio de Madrid 61.110 euros en billetes. Tenía los fajos escondidos en una caja de zapatos y entre la ropa de un cajón, dinero que la jueza a cargo de la causa cree que son de procedencia "ilícita" y que fueron descubiertos cuando fue detenido.
En un auto dictado el pasado 16 de febrero, pero hecho público este miércoles, la jueza María dels Àngels Lorenzo-Càceres describe los indicios que le hacen sospechar que este dinero proviene de las comisiones que, presuntamente, cobraba el general a empresarios a cambio de favores. Estas comisiones, supuestamente, las cobraba a cambio de facilitarles negocios con otras sociedades o con el proyecto europeo de asistencia en materia de seguridad a los países del Sahel, que dirigió en los últimos años de su carrera. La magistrada subraya que se han revisado los ingresos que el general recibió desde 2019 en sus cuentas bancarias, tanto de la Guardia Civil, como de la fundación pública española que administraba el proyecto GAR-SI Sahel, como de la Seguridad Social una vez jubilado. De esta investigación se extrae que estos ingresos "no justificarían el origen de los 61.110 euros", motivo por el cual se presupone su "procedencia ilícita".
El general, retirado del servicio activo desde enero de 2021 y jubilado en julio de este mismo año, fue detenido por el Servicio de Asuntos Internos de la Guardia Civil cuando estalló el caso, el pasado 14 de febrero, y este mismo día fueron registrados sus tres domicilios: en Madrid, en Sevilla y en Punta Umbría (Huelva). En el acto de ingreso en la prisión provisional, la instructora explica que en el domicilio de Madrid se encontraron 30.250 euros en billetes de 50 dentro de una caja de zapatos en el armario del dormitorio matrimonial, 2.400 euros en billetes de 50 en sobras metidos en una bolsa, dentro del mismo armario, y 28.460 euros en billetes de 200 y 50 envueltos en prendas de vestir en el ropero de otra habitación.
Para la magistrada, del análisis de la información recuperada de los móviles del intermediario que da nombre a la trama, Marco Antonio Navarro Tacoronte, así como de las investigaciones realizadas por la Policía y la Guardia Civil, se desprenden "indicios sobrados" que involucran al general Espinosa en delitos de soborno, tráfico de influencias y participación en grupo criminal organizado. En esta primera pieza del caso Mediador, la instructora aprecia pruebas de que el general cobró comisiones en efectivo, en tarjetas prepago y en especie de varios empresarios interesados en beneficiarse de sus influencias. En el sumario también consta que, al jubilarse, la nómina de entre 7.000 y 10.000 euros al mes que recibía Espinosa mientras trabajó para el proyecto europeo GAR-SI Sahel se convirtió en una pensión de 2.553 euros.
Espinosa "pensaba en su futuro"
El intermediario que da nombre al caso Mediador, Marcos Antonio Navarro Tacoronte, afirmó, en una conversación que fue grabada, que el general Espinosa "pensaba en su futuro económico, porque se iba a jubilar y tenía que buscarse ingresos para él y para su amante". Espinosa también intentó que uno de los empresarios con quien hacía negocios ilícitos contratara a su amante con un sueldo mensual de 3.000 euros. Navarro Tacoronte declaró durante la instrucción que él mismo le entregó al general sobres con cantidades en efectivo que iban desde los 1.500 a los 3.000 euros, dinero que recibía de empresarios a cambio de beneficiarse de sus influencias.
Bruselas detecta 12 millones sin justificar por Espinosa
La Comisión Europea alertó hace un año de los gastos "imprudentes" de un proyecto financiado con fondos europeos a la zona del Sahel liderado por el general Espinosa, quien en los últimos días ha llenado titulares de la prensa por su presunta implicación en el caso de corrupción llamado Mediador, el cual también involucra a un exdiputado del PSOE. Según avanza este miércoles la Cadena SER, desde Bruselas encargaron para abril de 2022 un informe sobre los resultados finales del proyecto GAR-SI SAHEL, que tenía por objetivo formar y equipar cuerpos policiales en Mauritania, Burkina Faso, Mali, Níger, Senegal y Chad. En el documento alertan que "hay, como mínimo, 12 millones de euros de gastos imprudentes e injustificados", además de "errores significativos" sobre importación de equipación militar.