El cantante de Sopa de Cabra, Gerard Quintana, ha cerrado filas con el vicepresidente del Parlament, Josep Costa. Quintana ha querido defender a Costa que los últimos días está recibiendo un gran número de críticas por haber participado en una reunión telemática con colectivos ultras e identitarios como el Frente Nacional.
En un tuit, el artista ha explicado que hace años que conoce al dirigente independentista y apunta que fue su abogado "en el proceso contra las calumnias de la ultraderecha" que lo acusaban "de terrorista en los diarios por posicionarme contra los caciques de la isla".
En la misma línea, Quintana carga contra todos los que acusan a Costa de "connivencia con el fascismo"; asegura que son unos mentirosos.
Costa se defiende
El vicepresidente del Parlament ha defendido que "por un error involuntario no hay que dimitir". "No ha muerto nadie por culpa mía, para entendernos", ha añadido en una entrevista en 'Planta Baixa' de TV3.
Por su parte, en el mismo programa, el presidente de ERC en el Parlament, Sergi Sabrià, ha reprochado a Costa que continuara conectado a la reunión telemática. "En diez minutos de reunión sabes perfectamente dónde estás y Costa se quedó y les hizo propuestas. Si te reúnes con los fascistas y eres vicepresidente 24 horas al día, te corresponde irte por dignidad", ha defendido.
En cambio, Costa ha negado que se haya reunido con partidos de extrema derecha y ha dicho que no identificó en toda la reunión a los representantes de Frente Nacional de Catalunya.
Costa ha admitido que se ha equivocado y que si hubiera sabido que también participaban miembros del partido xenófobo no lo habría hecho. "He aprendido las lecciones. Fue error mío", ha añadido. Pero, para Costa, no es motivo suficiente para dimitir como vicepresidente del Parlament tal como pide ERC y los comuns.