El conseller de Economia i Hisenda, Jaume Giró, ha acusado al Estado de despreciar la soberanía del Parlament por haber tumbado a través del Tribunal Constitucional la rebaja del IRPF a las rentas más bajas que introdujo el Govern el año pasado a través de la ley de acompañamiento de los presupuestos pactada con los comuns.

En la sesión de control al Govern celebrada este miércoles, Giró ha recordado que esta rebaja favorecía a las rentas de menos de 12.000 euros, es decir, "las personas más vulnerables" y ha acusado al Estado de despreciar también "las diferencias entre los territorios" para preservar "la unidad de su patria". "Todo aquello que este Parlament decide se lo cargan si atenta contra su poder", ha criticado.

Giró ha recordado que si el TC tumbó esta rebaja fue porque el Govern, del cual los comuns forman parte, la recurrió. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, argumentó que las comunidades autónomas tienen margen, de acuerdo con la legislación estatal, para elevar este mínimo en algunos supuestos, como la edad o la descendencia, pero "no pueden crear categorías nuevas", como lo es la suma de la base general y el ahorro.

El conseller de Economia, Jaume Giró, ha cargado contra el Estado / Foto: Sergi Alcàzar

El proyecto del Hard Rock

En respuesta a la diputada del PSC Rosa Maria Ibarra, Giró ha explicado que el proyecto del Hard Rock en el Campo de Tarragona "está donde estaba". Ha aclarado que "se está preparando el plan director urbanístico en este momento" y, una vez hecho, este "pasará a su aprobación a la Comisión de Urbanismo". "Estamos a la espera de que esto pase", ha explicado.

Sin entrar a concretar su posicionamiento, Giró ha reivindicado "un país vivo y equilibrado" que reciba "inversiones económicas para que la gente tenga lugares de trabajo más allá de la capital". "No seremos los que están en contra de proyectos que cumplan la normativa legal y urbanística, que generen riqueza para redistribuirla, que no supongan ningún euro público de gasto y que no vulneren ningún espacio natural protegido y que contribuyan a un país rico y equilibrado. Si esto es es así, no tiene nada por lo que sufrir", le ha dicho a la parlamentaria del PSC.

Giró, pues, ha tenido que hacer equilibrios con un tema delicado para el Govern. Y es que el Ejecutivo es consciente de que su socio prioritario para aprobar los presupuestos, la CUP, pone como condición la supresión del proyecto para dar luz verde a los números. Y la presión aumenta cada día desde que los anticapitalistas anunciaron ayer una enmienda a la totalidad.

 

Comuns y socialistas, también en desacuerdo

De hecho, hace años que los anticapitalistas llevan criticando el proyecto del Hard Rock, a lo que tildan de "especulativo". Igual que la CUP, los comuns, partido con el que el president Aragonès se ha abierto a negociar las cuentas, también rechaza el proyecto.

Los dos partidos también están en contra de presentar la candidatura para los Juegos Olímpicos de invierno del 2030. Uno de los últimos movimientos del Ejecutivo para seducir a la CUP fue, precisamente, prometer no asumir ningún coste nuevo para la Generalitat en el proyecto del Hard Rock y no formalizar la candidatura de los JJOO de invierno sin el acuerdo del territorio.

Quien sí que ve con buenos ojos ambos proyectos es el PSC. A través de una carta, el líder de los socialistas, Salvador Illaha pedido a Aragonès una reunión urgente para pactar "unos presupuestos de país". Sobre las negociaciones que el Govern mantiene con la CUP, los socialistas han opinado que "están vendiendo el país" a los anticapitalistas y se han mostrado contrarios a rechazar tanto la candidatura de los JJOO como el Hard Rock.

 

Imagen principal: el conseller de Economia i Hisenda, Jaume Giró, en la sesión de control al Govern de este miércoles / Foto: Sergi Alcàzar