La consellera de Economía, Alícia Romero, ha explicado al Govern durante la reunión de este martes del Consell Executiu los pasos que está siguiendo para dar cumplimiento al acuerdo de investidura con ERC, según el cual, a partir del 2026 la Generalitat tendrá que asumir la recaudación y gestión del IRPF en Catalunya. Romero ha detallado, como ya hizo el viernes en una comparecencia pública, la intención de incorporar de manera temporal 102 efectivos a la Agència Tributària de Catalunya (ATC) para la campaña de la Renta, y ha explicado que en la campaña de este año también se hará un "test" para compartir bases de datos y software de la Agencia Española de Administración Tributaria (AEAT).
"La Agencia Tributaria española y catalana, que en estos momentos han actuado de manera paralela, sí que quieren testear ya a través esta campaña del 2025 un trabajo colaborativo, conjunto, de compartición de datos, que tiene que ayudar a poder tramitar futuras campañas del IRPF y esta futura recaudación del IRPF de aquí a 2026", ha explicado a la consellera de Territori y portavoz del Govern, Sílvia Paneque, en la rueda de prensa posterior a la reunión del ejecutivo. El objetivo, ha añadido, es hacer un test de esta campaña del 25 y "ver también como se pueden integrar estas bases de datos y software".
102 efectivos temporales
Romero ha explicado al Govern que la participación del ATC en la campaña de la renta "tendrá una duración de seis meses y consistirá en un refuerzo temporal de efectivos para elevar tanto el volumen de citas presenciales como las horas de atención telefónica". Hasta ahora, el número de personas atendidas por el ATC en la campaña de la renta eran muy pocas, y el nuevo plan prevé la incorporación temporal de 102 efectivos, de los cuales 93 serán para administración y 9 técnicos gestores tributarios. También se ampliará el número de sedes para prestar apoyo y asistencia a los contribuyentes, hasta llegar a 36 oficinas y 87 puntos de atención.
De cara a la asunción de nuevos traspasos en materia tributaria, la conselleria ha anunciado que pondrá en marcha las convocatorias necesarias para incorporar hasta 90 nuevos efectivos a la plantilla de la Agencia, y que este volumen se irá incrementando progresivamente.
El acuerdo de investidura firmado entre PSC y ERC fija que el Gobierno tendrá que asumir la recaudación y gestión de los impuestos que pagan los catalanes, y que este traspaso se hará efectivo a partir del 2026 con la asunción por parte de la Agencia Tributaria de Catalunya de la totalidad el IRPF. No obstante, para hacerlo posible es imprescindible reforzar el ATC, que actualmente gestiona solo el 9% de los impuestos de los catalanes, mientras que la agencia estatal se encarga del 91% restante.
Eso obligará la ATC a multiplicar sus medios humanos, materiales y tecnológicos. La administración catalana dispone de 852 trabajadores, de los cuales 23 son inspectores y 269 técnicos tributarios, mientras que el AEAT tiene en Catalunya casi 5.000 funcionarios, entre los cuales, 498 inspectores y 1.600 técnicos.