El ministro de Asuntos exteriores, José Manuel Albares, ha informado este jueves de que el gobierno está analizando las consecuencias de la decisión de Argelia de suspender el tratado de amistad con España y dará una respuesta "serena, constructiva, pero firme" en favor de los intereses españoles. Albares, en una atención a los medios después de un discurso sobre la cumbre de la OTAN en Madrid, ha avanzado esta respuesta después de que los bancos argelinos hayan congelado las domiciliaciones bancarias relacionadas con las operaciones de comercio exterior de productos y servicios desde España y hacia España. El jefe de la diplomacia española ya lamentó este miércoles la decisión argelina de suspender el tratado entre los dos países y dijo no temer represalias en materia energética porque Argelia es un socio fiable. A esta decisión se ha referido para explicar que el Gobierno está analizando sus implicaciones tanto a España como a la Unión Europea (un trabajo que cree que concluirán este mismo jueves) para dar "la respuesta adecuada".
El ministro, sin embargo, ha negado que tengan información que indique "ninguna dificultad para acceder al gas argelino". Sin embargo, Albares ha explicado que el Gobierno está analizando "el alcance de las consecuencias prácticas" de la decisión de Argelia para adecuar la respuesta de España a sus intereses. El ministro ha reiterado el deseo del Gobierno de tener las mejores relaciones con Argelia y su adhesión a todo el contenido del Tratado de Amistad bilateral, que ha recordado que recoge la igualdad soberana de los Estados y la no injerencia en asuntos internos. Al plantearle si la congelación del comercio puede afectar al suministro de gas por parte de Argelia en España, ha insistido en que se está estudiando qué supone en la práctica, pero ha subrayado que este flujo gasístico "no tiene en estos momentos ningún inconveniente".
Recuperar la relación con Argelia
La vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera, también se ha manifestado este jueves sobre esta cuestión y ha afirmado que su ejecutivo "lamenta" la decisión de Argelia de suspender el tratado de amistad y vecindad firmada por los dos países en el 2002, y espera "recuperar esta relación tan pronto como sea posible". En una entrevista en Onda Cero, Ribera se ha mostrado confiada que la relación comercial entre los dos países con respecto al gas seguirá funcionando como hasta ahora. En este sentido, ha aprovechado para recordar la existencia de contratos en vigor entre la compañía argelina Sonatrach y las empresas españolas. "Las relaciones entre la comercializadora argelina (Sonatrach) y las empresas españolas que compran gas tienen obligaciones contractuales y confío en que sigan funcionando como lo que son, porque si no, sería un problema más complejo de resolver, no a través de relaciones diplomáticas, sino probablemente de arbitrajes o tribunales," ha precisado.
En todo caso, Ribera ha asegurado que, "hoy por hoy", su confianza es máxima porque los intercambios comerciales entre Sonatrach y sus clientes españoles "han ido funcionando muy bien". "Hace meses que los contratos están en un proceso de revisión de precios complicado entre Sonatrach y los compradores españoles, pero nada nos hace pensar que eso pueda hacerse bancarrota de manera unilateral por una decisión del gobierno argelino", ha apuntado. La vicepresidenta ha lamentado lo que está sucediendo con Argelia y ha asegurado que el Gobierno "está abierto a recuperar esta relación cuanto antes mejor". "Confío en que con el tiempo y buscando puntos de encuentro podamos superar esta situación cuanto antes mejor", ha concluido.