El Gobierno español continúa con su ofensiva contra el referéndum del 1 de octubre y ahora se fija en los bancos, a quienes ha pedido que denuncien cualquier movimiento de fondos vinculado al referéndum.

Según avanza El País, el acuerdo de la Comisión Delegada sobre la intervención de los gastos del Govern será enviado a todos los bancos y entidades de crédito con el objetivo de que ninguna oficina colabore con actividades relacionadas con el referéndum.

Por eso, el mismo Gobierno español insta a las entidades a comunicar al ministerio fiscal si detectan pagos o transferencias relacionadas con el 1-O.