El gobierno español ya ha anunciado hoy que no está dispuesto a atender la apelación al diálogo que el presidente Carles Puigdemont hizo desde la puerta de la prisión de Neumünster.
Fuentes del ejecutivo español han asegurado este sábado, en el marco de la Convención del PP en Sevilla, que mientras esté Mariano Rajoy su gobierno no dialogará "nunca" con el presidente, que es "un prófugo" de la justicia y cualquier contacto es "imposible". La interlocución, apuntan, se producirá sólo cuando haya un gobierno que "cumpla la ley".
El ministro de Justicia, Rafael Catalá, también se ha pronunciado sobre esta cuestión. "El señor Puigdemont el primero que tiene que hacer es atender sus responsabilidades ante la Justicia y dejar de ser uno huido de la justicia, cosa que pone de manifiesto su escaso compromiso ético y democrático como persona y responsable político," ha afirmado.
Por otra parte, fuentes del partido han apuntado también que la cúpula de la formación empieza a valorar la posibilidad que, fruto de la decisión de la justicia alemana, el presidente pretenda agotar los plazos e ir a unas nuevas elecciones en Catalunya. Sin embargo, aseguran que el Estado impugnará cualquier decisión de la justicia alemana favorable a los intereses de Puigdemont.