El programa con el que fue espiado el teléfono de Roger Torrent sólo puede ser comprado por gobiernos. Incluso el presidente del Parlament ha apuntado directamente hacia los aparatos del Estado. Desde La Moncloa, sin embargo, se lavan las manos en este asunto. "El gobierno no tiene constancia que el presidente del Parlamento haya sido víctima de un hackeig en su móvil", ha asegurado la portavoz María Jesús Montero. Le ha dicho que, en todo caso, lo denuncie ante los tribunales, pero que ellos no tienen nada que hacer en este caso.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de este martes, la ministra portavoz ha señalado que "el procedimiento cuando se conocen situaciones de este tipo es poner en conocimiento de la autoridad judicial la substracción o el hackeo, como haría cualquier ciudadano." Montero ha recordado que "cualquier intervención requiere siempre de una previa autorización judicial".
"El Gobierno no puede aportar información respecto de esta cuestión", ha concluido María Jesús Montero, que ha dicho haber conocido el caso pocos minutos antes de la rueda de prensa. "Hay que operar como cada vez que se produce una sospecha, dirigiendo una denuncia para que se investigue", ha reiterado. Ha cerrado la puerta a ningún tipo de investigación interna.
En una declaración institucional este martes, el presidente Roger Torrent ha denunciado que "en el Estado español se practica el espionaje contra adversarios políticos". En este sentido, ha señalado "ya lo sabíamos" pero "hoy ya tenemos las pruebas". Torrent ha calificado los hechos de "muy graves" y ha recordado que desde hace mucho tiempo varios organismos de defensa de los derechos humanos utilizan softwares como el Pegasus para "perseguir la disidencia política".
Fuentes del Gobierno insisten en que Torrent tiene que dirigirse a los tribunales y admiten que ni siquiera saben si tienen comprado el polémico software Pegasus.
¿Mesa de diálogo?
En otro orden de cosas, y ya superado el horizonte de las elecciones vascas y gallegas, María Jesús Montero ha reiterado que "el gobierno está disponible para reunirse". En este sentido, la dirigente socialista ha vuelto a pasar la pelota a la Generalitat. "Corresponde al Gobierno decir si quiere que se realice esta reunión en los próximos días", ha asegurado la ministra portavoz. Ha defendido que hay que reanudar los compromisos de la investidura para "avanzar en la resolución del conflicto a través del diálogo y la palabra".