El gobierno de Castilla-La Mancha que preside Emiliano García-Page ha aprobado este martes interponer un recurso de inconstitucionalidad contra la ley de amnistía. A finales de mayo, García-Page ya anunció que pediría un informe al Consejo Consultivo para saber si podía presentar el recurso ante el Tribunal Constitucional (TC). Según un comunicado del gobierno autonómico, este órgano consultivo ha concluido que el ejecutivo "sí está legitimado" para presentar el recurso. El ejecutivo asegura que este informe es "contundente" con respecto a la "inconstitucionalidad" de la ley. El informe no ha tenido ningún voto particular.

Según informa al ejecutivo de García-Page, el Consejo Consultivo recoge varios pronunciamientos del Tribunal Constitucional y concluye que es posible que la comunidad pueda presentar un recurso ante "cualquier infracción constitucional en la cual pueda incurrir una norma" y no solo en los casos relacionados directamente con la defensa de sus competencias.

El órgano consultivo también concluye que la ley es inconstitucional y plantea que, para su aprobación, habría hecho falta una reforma constitucional. También considera que la norma vulnera el principio de igualdad.

Desavenencias por la financiación

La aprobación de esta iniciativa coincide con una nueva polémica en torno a la cuestión territorial en la cual García-Page vuelve a estar implicado: el acuerdo ERC-PSC para la financiación. A primera hora de la tarde de este martes, poco después de que finalizara la rueda de prensa del Gobierno en la Moncloa, el PSOE ha enviado un comunicado en el cual manifiesta que la Comisión Ejecutiva Federal del partido avala el preacuerdo entre el PSC y ERC para investir a Salvador Illa. Este aval, otorgado desde Madrid y especificado negro sobre blanco en el comunicado, contrasta con las declaraciones críticas que se han ido produciendo a lo largo de las últimas horas desde diferentes federaciones socialistas del resto de España.

A pesar de todo, el PSOE se compromete a impulsar y hacer efectivo el acuerdo en aquellos puntos donde su materialización dependa de las instituciones de carácter estatal en que el partido tiene representación. A pesar de la buena predisposición de la cúpula, la respuesta al preacuerdo anunciado desde otros espacios del socialismo español ha sido gélida. Algunas de las reacciones eran del todo esperadas, como es el caso de la del secretario general del PSOE, Javier Lambán, que fue uno de los primeros a decir la suya sobre el preacuerdo, señala que se trata "de una ruptura brutal de la igualdad entre todos los españoles".

A la reacción de Lambán se le sumó la del presidente de Castella-la-Manxa, Emilio García-Page, denunciando "el silencio ensordecedor [del PSOE] ante el grave atentado contra la igualdad anunciado por ERC".