La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, ha pedido un gesto al independentismo catalán después de los indultos a los 9 presos políticos. Calvo ha argumentado en declaraciones a TV3 que este gesto es "lógico y razonable".
La número dos del Gobierno ha asegurado que, después de la aprobación de los indultos, hay que cambiar la mirada sobre todo lo que ha sucedido y ha pedido que los independentistas "muevan ficha", en el sentido de que se adecuen al modelo constitucional autonómico.
"Nosotros con el indulto hemos utilizado un mecanismo de la democracia, de la Constitución española, que no pone en cuestión la sentencia pero que sí hace un acto político de gran contundencia para que estas personas no estén privadas de libertad", ha indicado Calvo.
Amnistía y autodeterminación
Preguntada sobre la amnistía, que es la opción que defienden el Govern de la Generalitat y las entidades soberanistas, Calvo ha afirmado que "no es posible" en la Constitución. La vicepresidenta ha pedido evitar que la sociedad catalana caiga en "una quimera, una frustración continua que no conduce a ningún sitio más que a perder prestigio".
Calvo ha apuntado que la Constitución española está "absolutamente homologada" a las de Francia, Alemania o Italia. Con respecto a un hipotético referéndum de autodeterminación, también ha dicho que "no es posible" y ha hecho referencia al artículo 2 de la Constitución, que instaura "la unidad del territorio y el respeto a la autonomía política".
Pocas horas después de pedir el gesto, el periodista Antonio Baños le ha respondido. Y lo ha hecho adjuntando el emoticono de una peineta.
Mientras tanto, el diario Süddeutsche de Munich, considerado el segundo diario alemán, ha puesto deberes a España, después de la salida de los presos políticos de los centros penitenciarios. El rotativo ha criticado el partidismo descarnado de la política española que a su entender está erosionando al Estado, al mezclarse con el procés independentista catalán.
"Las mentiras en torno al conflicto de Catalunya están corroyendo al Estado español. Que necesaria que sería un poco de cuidado", ha indicado.
El Süddeutsche pone como ejemplo que todavía ahora no existe un número exacto de manifestantes, aceptado por todo el mundo, para la manifestación contra los indultos que se celebró en la plaza Colón de Madrid. "Eran 25.000 personas, dice el Gobierno de izquierdas. Eran 126.000, dice el gobierno municipal de derechas. Los dos se basan en cifras policiales, y los dos parecen tener una motivación política. Unos consideran el número demasiado bajo y otros, demasiado alto. Y lo que parecería una anécdota, es un ejemplo de la descomposición de las bases de la convivencia democrática" en España, apunta. "Los hechos ya no cuentan, y hay un terreno abonado para las mentiras", ha añadido.