Pedro Sánchez no estaba invitado ayer a la videoconferencia convocada por Joe Biden con líderes europeos para tratar la situación en Ucrania. Estaban Macron (Francia), Scholz (Alemania), Draghi (Italia) y Duda (Polonia), además de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen; el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel; y el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg. Pero no Pedro Sánchez.
Hoy, tras la polémica generada por su ausencia, diversos miembros del Gobierno se han esforzado en destacar el papel del presidente y de España, como en el caso del ministro Félix Bolaños, que ha asegurado que el Estado está "en el centro del circuito de toma de decisiones" sobre el conflicto en Ucrania. Preguntado en una entrevista en La 1 por si su ausencia había generado desconcierto en el Gobierno, por el hecho de no estar invitado a participar en la videoconferencia, Bolaños ha querido evitar la polémica, justificando su "relación muy fluida con nuestros aliados y socios. Hay conversaciones continuamente". "Tenemos información, estamos coordinados continuamente", ha subrayado el ministro.
Coordinación con EE.UU.
Según Bolaños, lo importante es que se siga apostando por la diplomacia para garantizar la legalidad internacional, para lo cual son necesarias, en su opinión, las medidas de disuasión y una posición única en la UE y en el conjunto de la OTAN. Preguntado por si después del plantón en la videoconferencia se puede producir alguna llamada entre Sánchez y Biden en los próximos días, el ministro de Presidencia ha recalcado que estas comunicaciones entre España y Estados Unidos se producen constantemente: "El nivel de información y coordinación es completo", ha insistido.
Aparte de la no presencia de Sánchez en la videollamada de Biden con líderes europeos, el Gobierno tiene otro frente abierto por lo que al conflicto entre Rusia y Ucrania se refiere: las discrepancias entre los socios del Gobierno sobre el papel que debe desarrollar el Estado en esta crisis. Ante las críticas de miembros de Podemos, Bolaños ha querido dejar claro que "la política exterior la marca el presidente del Gobierno". Además, ha negado que estas discrepancias ni tan siquiera existan, "básicamente porque todos apostamos por la diplomacia, todos estamos para evitar el conflicto y todos estamos en el no a la guerra", ha dicho. Una de las voces más críticas ha sido la del exvicepresidente Pablo Iglesias, sobre quien ha evitado pronunciarse.
Aviso de Robles
Quien también se ha pronunciado es la ministra de Defensa, Margarita Robles, que ha asegurado que la situación en Ucrania es "preocupante" pero "no dramática" y ha confiado en que la vía diplomática "tenga un final feliz", a la vez que ha considerado que nadie puede atribuirse "el no a la guerra". "En el no a la guerra estamos todos", ha subrayado Robles en la Cadena Ser al ser preguntada sobre esa consigna que está difundiendo Unidas Podemos, si bien ha afirmado que España no puede mirar para otro lado cuando en este momento hay 34 guerras declaradas en el mundo.
La ministra ha precisado que España no ha enviado más refuerzos militares a la zona, sino que ha adelantado "un par de semanas lo que estaba previsto" y ha recordado que el Estado tiene tropas desplegadas en Letonia desde hace seis años y que los "cazas" españoles llevan muchos años realizando misiones de policía aérea en el mar Negro.