El Gobierno de Pedro Sánchez pretende celebrar en Barcelona un acto de reparación por el fusilamiento de Lluís Companys por parte del estado español. Así lo confirman a ElNacional.cat fuentes de la capitanía del Ministerio de Memoria Democrática al día siguiente del 84.º aniversario del asesinato del president. Este martes, durante las tradicionales ofrendas florales en el Fossar de la Pedrera, Esquerra Republicana exigió al Gobierno una "disculpa solemne" por la muerte del president de la Generalitat en 1940. Y este miércoles, el Parlament ha aprobado con los votos de ERC, Junts, CUP y comuns (con abstención del PSC) una declaración en que se insta al Estado a pedir "perdón" por haber matado a Lluís Companys. Estas mismas fuentes del Gobierno, preguntadas por este periódico si aceptarán la exigencia del independentismo de pedir disculpas, explican que "se está estudiando la fórmula jurídica pertinente" para dar respuesta a ello.
Así, el Ministerio que lidera Ángel Víctor Torres tiene claro que tiene que celebrar este acto "próximamente", aunque no se atreven a fijar ninguna fecha en el calendario. Insisten, eso sí, que el acto tendrá lugar en la capital catalana. Sería un nuevo gesto del Gobierno en la dirección de reparar la figura de Lluís Companys, aunque la gesticulación hecha hasta ahora todavía no ha sido suficiente: la Comisión de la Dignidad reafirmaba hace unos meses que solo unas disculpas pueden reparar el daño generado por el estado español.
Las sentencias contra Companys, declaradas ilegales y nulas
El pasado mes de julio, el Ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática reconoció formalmente por primera vez que los tribunales que condenaron a Lluís Companys fueron "ilegales e ilegítimos" y que fue represaliado y fusilado por ser el president de la Generalitat. El Gobierno admitía por primera vez desde el asesinato del dirigente republicano que se le había quitado la vida por motivos "políticos, ideológicos y de conciencia" como a muchas otras personalidades durante la guerra civil y la dictadura franquista.
El ejecutivo de Sánchez admitía que Companys fue asesinado "por haber sido abogado de los sindicatos únicos y de la CNT, por haber organizado la Unión de Rabassaires, por haber sido fundador de Esquerra Republicana, por haber proclamado la República el 14 de abril de 1931, y por cargos públicos ejercidos durante la Segunda República, concretamente, por haber ocupado la presidencia de la Generalitat".
Insuficiente
Sin embargo, la Comisión de la Dignidad lo tachó de insuficiente y exigió que el Estado pida perdón por su asesinato. La plataforma manifestó su "indignación por la manipulación de la figura del president" y recordó que el Parlament ya anuló los casi 70.000 consejos hechos en Catalunya: "Lo que tiene que hacer el Estado es pedir al pueblo de Catalunya perdón y reconocer su responsabilidad en el asesinato, como lo hicieron a la Generalitat los cónsules alemán y francés por colaborar en la detención y deportación".
Acto de reparación de Salvador Puig Antich
Precisamente este miércoles, el Gobierno ha entregado a las hermanas de Salvador Puig Antich un documento de "reparación" en favor del anarquista y antifascista. El atestado admite la "persecución y violencia" sufrida por "causas políticas, ideológicas y de conciencia" por motivo de la dictadura. También se lo identifica como "víctima" por haber sido condenado a pena de muerte. El documento añade que la actual ley de memoria democrática declara "la ilegalidad y la ilegitimidad de los tribunales, jurados o cualquier otro órgano penal y administrativo, como los Consejos de Guerra, constituidos para imponer condenas o sanciones de carácter provisional, así como la nulidad de las sentencias y resoluciones que dictaron, para ser contrarios al Derecho y vulnerar las más elementales exigencias de un juicio justo".
"Hace cincuenta años que luchamos por eso; estamos muy emocionadas", ha dicho Immaculada Puig Antich en un acto en que ha sido acompañada de sus hermanas Merçona, Montse y Carme. Todas ellas han declarado más tarde ante los medios de comunicación que la celebración de este acto —en la sede del Ministerio, en Madrid— ha devuelto la "dignidad" a su hermano, arrebatada hace ya cinco décadas. El ministro Torres ha celebrado que se pueda producir un acto de "reparación y justicia" con las víctimas de la dictadura, como de "no repetición de la verdad".
Salvador Puig Antich tenía solo 25 años cuando fue ejecutado el 2 de marzo de 1974 a garrote vil en la prisión Modelo de Barcelona. Militante anarquista y antifascista, fue condenado a la pena de muerte por un Consejo de Guerra que lo consideró responsable del homicidio de un subinspector de policía en Barcelona dentro de un portal del cruce entre las calles Girona y Consell de Cent.