Portazo del Gobierno a la idea de sancionar a las empresas que se marcharon de Catalunya en 2017 impulsadas por el Estado y que no regresen. "Estamos por encontrar un modelo en positivo, nunca desde la coerción", ha manifestado este miércoles el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu. El exalcalde de Barcelona ha sido preguntado por la prensa en los pasillos del Senado sobre la propuesta que Junts per Catalunya reivindica en las últimas horas, y se ha mostrado abierto a abordar cómo se tiene que lograr que las empresas vuelvan al país, pero cerrando completamente la puerta a que la solución pase por multar.
"Es su tesis, pero nosotros tenemos otras", ha reiterado también Jordi Hereu, reivindicando la necesidad de "dialogar" de forma constante con Junts per Catalunya. Así, ha recordado que el retorno de empresas en Catalunya forma parte de "la agenda del reencuentro" que la Moncloa quiere desplegar con la Generalitat y los partidos independentistas. "Es a través de la normalización como se debe crear un clima de confianza para que las empresas puedan volver; creo más en los incentivos en positivo", ha sentenciado el ministro de Industria sobre esta cuestión.
Este martes, el Gobierno y el PSOE hicieron un verdadero ejercicio de ambigüedad quirúrgica para no tener que pronunciarse sobre la propuesta de Junts per Catalunya. Aunque la propuesta que hizo el portavoz de la formación independentista, Josep Rius, era clara, no lo fue la respuesta del Ejecutivo y el partido de Pedro Sánchez. "Siempre damos la máxima seguridad jurídica a nuestras empresas" repitió incontables veces la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Desde la Moncloa se negaban a valorar la propuesta de Junts. Fuentes del ejecutivo español insistían en que estaban negociando con los independentistas cuando se les preguntaba si sería posible sacar adelante medidas que incentiven el retorno de las empresas.
También fue preguntado por esta cuestión Patxi López en el Congreso de los Diputados. "Estamos abiertos a eso", respondió el portavoz de los socialistas en la cámara baja cuando en rueda de prensa se le preguntó sobre la posibilidad de incorporar la idea de Junts per Catalunya en forma de enmienda en los decretos ley que deberán votarse este miércoles. "Un decreto, si se tramita como proyecto de ley, puede tener enmiendas", ha dicho el exlehendakari. Y fue un poco más allá que la portavoz del Gobierno: "Siempre defenderemos facilitar el retorno de las empresas, el cumplimiento de la ley de sociedades de capital y garantizar la seguridad jurídica".
Mientras tanto, la Generalitat rechazó de pleno la propuesta de Junts per Catalunya. Para el Gobierno, plantear esta medida supone un "agravio" para las empresas que decidieron quedarse. Además, la portavoz del ejecutivo, Patrícia Plaja, señaló que "la gran mayoría" no trasladaron sus sedes sociales y, por lo tanto, supondría una "penalización" para ellas. Por todo ello, Plaja rechazó las "gesticulaciones" de Junts por los decretos del Gobierno, ya que son "necesarios" para Catalunya.