La confirmación de que el juez Pablo Llarena no tiene intención de aplicar la amnistía al president en el exilio Carles Puigdemont ni a los exconsellers Toni Comín y Lluís Puig se ha conocido esta mañana mientras el Govern de Salvador Illa celebraba su reunión semanal. En la rueda de prensa posterior, la portavoz del ejecutivo, Sílvia Paneque, ha insistido en reclamar que la ley de amnistía se aplique con "máxima celeridad y sin subterfugios".

Paneque ha subrayado que de la misma manera que el Govern defiende la necesidad de respetar los fallos judiciales, también reclama "que el poder judicial respete aquellas decisiones aprobadas por el poder legislativo". La consellera ha insistido en que esta es una ley importante para la normalización política, social e institucional de Catalunya. Y ha evitado valorar el hecho de que esté beneficiando más a los policías que protagonizaron las cargas del 1-O que a los manifestantes independentistas con el argumento que hay que aplicarla independientemente de las personas concretas que beneficie.

Presupuestos, la prioridad

Por el contrario, la portavoz no ha querido valorar los recursos presentados contra la ley de amnistía ante el Tribunal Constitucional por diferentes autonomías, incluido el recurso del presidente de Castilla-la Mancha, el socialista Emiliano Garcia Page, y se ha limitado a asegurar que se trata de mecanismos legales que están a disposición de los gobiernos.

Todo ello en un inicio de legislatura en qué el ejecutivo de Illa no quiere oír ni hablar de la entrada de socios de gobierno, ni de ERC ni de los Comuns. "El Govern lo que tiene previsto es gobernar, centrándonos en aquellas cuestiones que se presentan como retos importantes en Catalunya, como es el de la educación. El Govern está centrado estrictamente en gobernar", ha asegurado al ser interrogada sobre este tema.

Según la portavoz, el Govern se marca como prioridad para las próximas semanas la elaboración de los presupuestos del próximo año, mientras que la nueva financiación pactada con ERC tendrá que quedar para más adelante.

Enseñanza

Sin entrar en mayores concreciones, la portavoz ha insistido en el acuerdo con la OCDE para mejorar los resultados del informe PISA y revertir unos datos que sitúan a Catalunya en la cola de las comunidades autónomas de Catalunya. Paneque ha descrito la situación de la enseñanza como "francamente mala", aunque ha rechazado entrar a valorar la gestión hecha los últimos años por los consellers de ERC y ha asegurado que esta mejora se abordará de acuerdo con la comunidad educativa.

La portavoz ha explicado que la cifra de profesores con que empieza este curso supera los 82.000, más que el año anterior a pesar del descenso del número de alumnos, y ha anunciado que se han adoptado medidas como reducir la carga burocrática que tienen que atender profesores y profesoras, tal como ha pedido el sector; ratios reducidas en las aulas de primaria; sacar los móviles de las aulas, para reforzar la concentración; y garantizar la modalidad dual para todos los alumnos de FP.

Por lo que respecta al catalán y la immersión lingüística en las escuelas, Paneque se ha limitado a insistir en que la voluntad del Govern es que "el catalán sea lengua vehicular y piedra angular de nuestro sistema educativo".