Para el Gobierno, el rechazo del Tribunal Supremo a los recursos contra los indultos a los presos políticos "valida" la decisión de concederles la medida de gracia. En estos términos se ha pronunciado la ministra de Transportes, la catalana Raquel Sánchez, que ha celebrado el auto del alto tribunal porque la medida "estaba justificada". De la misma manera, la dirigente socialista ha rechazado la estrategia de judicialización de la derecha y la extrema derecha de acudir en amparo al Tribunal Constitucional, al considerar que sí que están legitimados para recurrir la libertad de los presos políticos porque son parte afectada.
Este jueves, la sala tercera del Tribunal Supremo rechazó todos los recursos presentados contra los indultos, incluidos los del PP, Ciudadanos y la extrema derecha de Vox. Los magistrados, por tres contra dos, hicieron suyas las alegaciones de la Abogacía del Estado: la falta de legitimación activa "en todos y cada uno de los recursos interpuestos".
El reconocimiento o no de la legitimidad era el primero de los pasos. Según la doctrina del Tribunal Supremo, los partidos políticos no están legitimados en este tipo de recursos. El problema era Vox, que también fue acusación popular en el juicio del 1-O. Finalmente, sin embargo, tampoco ha sido estimado su recurso. Al ser rechazada la legitimación de los recurrentes, el Tribunal Supremo ni siquiera tendrá que entrar en el fondo de la cuestión; es decir, no se tendrá que pronunciar sobre si los indultos fueron concedidos correctamente por el Gobierno o no.
En este contexto, en una entrevista en TVE este viernes por la mañana, Raquel Sánchez ha asegurado que el fallo judicial "valida la decisión del Consejo de Ministros" y ha subrayado que "respetamos los fallos judiciales cuando nos favorecen y cuando no". Según la ministra de Transportes, además, esta decisión demuestra que la medida de gracia "estaba plenamente justificada" y "cumplía los requisitos que puede valorar el Consejo de Ministros para concederla".
Pero los partidos de la derecha no se dan por satisfechos. Ayer mismo, Pablo Casado confirmó que el PP recurrirá la decisión del Tribunal Supremo. El jefe de la oposición insiste en que su partido está "legitimado" como afectado tal como, según su opinión, demuestra la investigación sobre los Comités de Defensa de la República (CDR). Además, subraya que es su deber defender "la unidad nacional y la ley". En la misma línea, el portavoz de Ciudadanos, Edmundo Bal, mostró su discrepancia con el criterio de la Sala y anunció que recurrirán en amparo.
La respuesta del Gobierno no se ha hecho esperar. La ministra Sánchez ha denunciado la estrategia de "judicializarlo todo" y querer "confrontar con Catalunya". En este sentido, la titular de Transportes ha insistido en que "los indultos están previstos en nuestro ordenamiento jurídico" y lo ha contrapuesto con la actitud de La Moncloa, que pasa por el "diálogo, el acuerdo y el pacto". Y ha remachado: "Ahora somos capaces de recuperar unas relaciones que se vieron rotas y nos están permitiendo avanzar".