El Gobierno no llevará al próximo Consejo de Asuntos Generales de la Unión Europea la votación sobre la oficialidad del catalán. Así lo confirman a ElNacional.cat fuentes del Ministerio de Exteriores, que argumentan que desde el departamento liderado por el ministro José Manuel Albares nunca dieron por hecho que eso se acabara votando este martes, día 12 de diciembre. "Los informes llevan tiempo, como hemos dicho desde el primer día", señalan. La reunión de este martes, sin embargo, es la última que se celebrará durante la presidencia rotatoria de la UE en manos de España.
Así pues, tal como ha avanzado el periódico Ara, el Gobierno ha rechazado llevar la votación de esta cuestión a la reunión del Consejo de Asuntos Generales de este martes. Ahora bien, eso no significa que el tema no se debata. Sin embargo, sea como sea, el Gobierno pierde así la última oportunidad que tenía de sacar adelante la oficialidad del catalán, el gallego y el euskera ostentando la presidencia de turno de la UE, que acaba a finales de año. Se trata de una medida, al fin y al cabo, que tendría que contar con la luz verde de los 27 estados miembros de la UE. Y, por mucho que hasta ahora ningún mandatario se haya opuesto frontalmente a ello, la iniciativa genera recelos, y es por eso que el ejecutivo español todavía no ha podido normalizar en Europa las lenguas del Estado cooficiales con el castellano.
La propuesta que ha hecho hasta ahora el Gobierno para mirar de convencer al resto de socios comunitarios de normalizar en Europa el catalán, vasco y gallego es incluir las tres lenguas en el régimen lingüístico de la Unión Europea. Eso se hacía para despreocupar al resto de estados por si existe un efecto contagio que provoca que otras lenguas minorizadas en Europa intentan reivindicar también sus derechos dentro del club de estados.
Pero eso generó cierto malestar en el resto de socios comunitarios, porque España envió la propuesta pocas horas antes de que se celebrara el pasado encuentro. Albares también ha propuesto que el coste total de las traducciones a estas tres lenguas sería asumido por España.
Fuentes del Ministerio de Exteriores han asegurado siempre a este periódico que la oficialización del catalán, el gallego y el vasco en Europa es un "compromiso" del Gobierno con el independentismo. Solo hay que tener en cuenta que es una exigencia de Junts y ERC al PSOE. Por mucho que desde la Moncloa se insista en que hay optimismo en que algún día Europa normalizará el uso de estas tres lenguas, insisten en todo momento en que "no se puede correr más", y que es mejor tenerlo bien amarrado que someterse a una votación sin la confianza en que ningún Estado votará en contra.