La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, ha vetado este miércoles al president de la Generalitat, Quim Torra, en la hipotética mesa de diálogo, si es inhabilitado por el Tribunal Supremo. "No se podrá sentar en ella" ha indicado. Calvo ha apuntado que, independientemente de la presencia del president, la mesa "existirá" porque su Gobierno no considera la mesa como un elemento "estratégico" sino que tiene una "convicción política profunda" de resolver el conflicto catalán por el diálogo. Sea como sea, ha dicho, "nos sentaremos los que nos corresponda en cada momento y cada día en las condiciones de legalidad que conviene".
"Somos un Gobierno que hace política siempre en la legalidad. La mesa existe por encima de cada uno de los que la componemos, y si algún miembro no se puede sentar porque está inhabilitado la mesa, el diálogo, el reencuentro y la posibilidad de que Catalunya salga de la situación que tiene, continúa vigente", ha dicho la vicepresidenta en una entrevista en Onda Cero.
"Yo no sé lo que decidirá el Tribunal Supremo, pero lo que está claro es que este gobierno actúa con la legalidad en la mano y haciendo política dentro de esta legalidad", y por lo tanto "si Torra es finalmente inhabilitado no se podrá sentar en ninguna mesa, pero la mesa existirá".
Calvo ha indicado que Torra "insistió" en la desobediencia en su declaración en el TSJC y ha advertido que este comportamiento "no se puede hacer en un Estado de derecho". "Eso no sirve para nada", ha dicho.
Según Calvo, en caso de que Torra desobedezca de nuevo una hipotética inhabilitación, el Gobierno "no tiene que hacer nada" porque "España es un estado de derecho donde la justicia y las leyes reaccionan" y "nadie puede incumplir la ley".