El Consell Executiu ha aprobado este martes la memoria preliminar del anteproyecto de ley contra el racismo en todas sus formas y expresiones, impulsada por el Departament d'Igualtat i Feminismes. Se trata de una ley que tratará las diferentes formas y expresiones del racismo, como el antigitanismo, la islamofobia, la xenofobia y otras formas de discriminación étnico-racial. La norma abordará el racismo de manera integral, incluyendo tanto el racismo estructural como el racismo institucional que pueden ejercer los propios poderes públicos. De esta manera, se quiere aplicar la perspectiva antirracista a todas las políticas públicas y a todos los niveles de la administración.
La elaboración de una ley específica que aborde el racismo como un fenómeno sistémico, teniendo en cuenta sus causas y consecuencias, dará cumplimiento a una directiva europea del año 2000 relativa a la aplicación del principio de igualdad de trato de las personas independientemente de su origen racial o étnico, e incorporará las prioridades y actuaciones que se incluyen en el Pla d'Acció per l’Antiracisme de la Unión Europea 2020-2025. La ley quiere erradicar las múltiples formas de desigualdad, discriminación y violencia étnico-racial que afectan las personas racializadas y/o migrantes en Catalunya.
La discriminación en datos
Los datos existentes apuntan al incremento del racismo. Según el informe anual de SOS Racisme del 2020, se identificaron 182 situaciones de racismo en Catalunya, de las cuales sólo 99 fueron denunciadas como una vulneración de derechos con motivación racista. El mismo año, la Fundación Secretariado Gitano incluye en su registro 633 casos de discriminación y antigitanismo, y el Observatorio de la Islamofobia en Catalunya, 19 casos de islamofobia manifiesta y 15 casos de vejaciones personales. Además, informes de organismos internacionales de derechos humanos como el de la FRA (European Union Agency for Fundamental Rights) del 2020 denuncian la persistencia del racismo y el auge de la ideología de extrema derecha en toda la Unión Europea, con el aumento de los discursos y los delitos de odio por motivos racistas.
Desde la Conselleria d’Igualtat i Feminismes se quiere construir esta ley conjuntamente con la ciudadanía, mediante un proceso participativo amplio que incluya todas sus aportaciones y propuestas. Así, se abre un periodo público de consulta previa de la ley durante tres meses y medio en qué, aparte de los medios digitales como el portal Participa.gencat o el uso de aplicaciones de mensajería instantánea, se organizarán reuniones presenciales por todo el territorio catalán en esta fase inicial de la elaboración de ley. Se facilitarán cuestionarios traducidos a diferentes lenguas para garantizar la participación de todo el mundo.
Estos encuentros permitirán obtener información de la ciudadanía, entidades, organizaciones sociales, colectivos no constituidos formalmente y otros agentes claves sobre la identificación de la problemática, las estrategias de abordaje y las medidas concretas de actuación hacia el racismo y sus diferentes formas y expresiones.
Fruto de las aportaciones recogidas durante la consulta previa y el proceso participativo con entidades y personas expertas, se elaborará un primer borrador de propuesta de texto de la ley. La redacción del anteproyecto de ley se sincronizará también con los trabajos de la Comissió d’Estudi del Racisme Institucional i Estructural creada en el Parlament de Catalunya el mes de noviembre pasado.