El Govern ha optado por esquivado la polémica alrededor de la creación de la Superliga Europea. El ejecutivo ha evitado valorar la iniciativa y se ha limitado a asegurar que "respeta" la decisión de los clubs impulsores. En este sentido, la consellera de Presidencia, Meritxell Budó, ha recordado en la rueda de prensa posterior al Consell Executiu que la iniciativa afecta a entidades privadas y ha apelado al diálogo para evitar que perjudique a otras competiciones.

"No es que tenga mucho que decir el Govern de Catalunya", ha argumentado al ser interrogada al respecto la consellera de Presidència, que tiene dentro de su departamento la Secretaria d'Esports.

Mejor encaje

Budó ha asegurado que el ejecutivo catalán respeta la decisión, que afecta a la "libre asociación" de entidades privadas, y ha emplazado al diálogo para encontrar el "mejor encaje" ante los interrogantes y las tensiones que puedan surgir en relación a la afectación de esta nueva competición con las ya existentes u organizaciones como la Liga Profesional de Fútbol o federaciones estatales".

La Superliga europea, que se ha presentado formalmente este fin de semana, cuenta con doce clubs impulsores, entre los cuales, el FC Barcelona. Tiene como objetivo sustituir la Chapions y asegura que no tiene que provocar conflictos de intereses con las ligas nacionales.

El FC Barcelona es uno de los impulsores de la iniciativa de la Superliga / Efe

No obstante, se han pronunciado en contra no sólo la UEFA y la Liga sino también máximos responsables de los gobiernos europeos, como el presidente francés, Emmanuel Macron, o el premier británico, Boris Johnson. En el Estado español se ha mostrado en contra de la iniciativa la Moncloa a través de una nota de prensa, pero también el ministro de Cultura y Deportes, José Manuel Rodríguez Uribes, o la ministra de Exteriores, Arancha González Laya, que advirtió que el fútbol es mucho más que un juego y tiene un componente de identidad para mucha gente.

En cambio, a favor se ha pronunciado el conseller de Polítiques Digitals, Jordi Puigneró, que a través de un tuit subrayó la desconexión del marco mental español que puede representar esta iniciativa.

El Govern quita hierro

No obstante, en la rueda de prensa del Govern, Budó ha evitado entrar en valoraciones políticas y ha optado por quitar hierro a la situación recordando que no es un hecho aislado en el escenario deportivo internacional, y que también en el mundo del baloncesto hay un planteamiento similar con la Eurolliga.

Budó ha insistido cada vez que se le ha preguntado que si se acaba haciendo se tiene que conseguir que sea compatible con otras competiciones, y "no tiene que ser excluyente", por lo cual ha reclamado un "encaje y convivencia en beneficio del deporte". "No tiene que perjudicar al conjunto del deporte tenemos que mirar de hacerlo compatible", ha reclamado.

 

En|A la imagen principal, el Consell Executiu reunido esta mañana en el palacio de la Generalitat / Jordi Bedmar