El Govern ha marcado distancias con la decisión de la presidenta del Parlament, Laura Borràs, de proponer la paralización de la actividad de la Cámara catalana hasta que no se acuerde una respuesta ante la decisión de la Junta Electoral Central de suspender al diputado Pau Juvillà. La portavoz del Govern, Patrícia Plaja, se ha amparado en la voluntad de respetar las decisiones del legislativo y ha asegurado que Borràs no ha hecho saber al president, Pere Aragonès, ni al Govern su propuesta que en el momento en que se ha celebrado la rueda de prensa posterior al Consell Executiu todavía debatía la Mesa. "En el Govern no podemos entrar a valorar una decisión que, de hecho, ni siquiera conocemos de primera mano", ha remachado la portavoz.
La presidenta del Parlament ha propuesto esta mañana a la Mesa del Parlament detener la actividad de la Cámara hasta que la Comisión del Estatuto del diputado no se pronuncie sobre la decisión de la JEC de retirar el escaño al diputado de la CUP Pau Juvillà después de que ha sido condenado a una pena de seis meses de inhabilitación por no haber retirado los lazos amarillos de su despacho a la Paeria en periodo electoral. Borràs comunicó ayer la propuesta a los representantes independentistas de la Mesa y hoy lo ha trasladado al órgano de gobierno de la Cámara.
La portavoz del Govern se ha limitado a expresar todo el apoyo "profundo y sincero" hacia Pau Juvillà tanto por la decisión anunciada por la JEC como también por los problemas de salud que lo han obligado a rebajar su actividad política y le ha impedido estar hoy a la reunión de la Mesa. A partir de aquí, a pesar de reiterar que la decisión de la JEC es arbitraria y con fundamentación ideológica, ha insistido en que "el Govern siempre es muy respetuoso" con las decisiones del poder legislativo".
Mesa de diálogo: electoralismo
La portavoz también ha evitado valorar la noticia que ayer trascendió que el Gobierno español ha decidido aplazar hasta la próxima primavera la reunión de la mesa de diálogo con la Generalitat. Plaja ha asegurado que el Govern no tiene conocimiento de ningún cambio sobre los acuerdos establecidos al inicio de esta negociación y que tampoco le consta que haya ningún cambio de fecha sobre el calendario previsto.
"Es en el Gobierno español a quien pedimos que aclare si hay algún condicionante nuevo sobre el cambio de fecha o sobre algún aspecto", ha reclamado, además de admitir que al ejecutivo "no le gusta que se juegue de manera electoralista en la negociación de la mesa de diálogo".
Tampoco ha aportado más información sobre la reunión que ayer mantuvo el president, Pere Aragonès, y la consellera de Presidencia, Laura Vilagrà, con el presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco, para abordar la polémica en torno a los Juegos Olímpicos de Invierno. Se ha limitado a explicar que se produjeron las reuniones, que fueron positivas y que el Govern sigue impulsando este tema. "El posicionamiento es lo mismo de los últimos días. Ningún cambio. Ha habido reuniones, pero estamos en el mismo lugar donde estábamos". ha sintetizado.