El nuevo ejecutivo del president Salvador Illa ya ha iniciado la elaboración del plan de Govern que, en la línea del discurso de investidura del líder socialista, establece tres líneas de actuación fijando como prioridades elementos como la consecución de la financiación singular, el "liderazgo" de Catalunya en la transición verde o la lucha contra la violencia machista. La reunión del Consejo Ejecutivo de este martes ha servido para iniciar la elaboración de esta hoja de ruta, tal como ha explicado la portavoz del Govern, Sílvia Paneque, a quien ha detallado que los consellers se encontrarán el próximo viernes y sábado en el Monestir de Poblet, bastión tarradellista, para "detallar y concretar" las prioridades de cada departamento.
La lengua y cultura como "columnas vertebrales" de la nación
Con todo, el Govern enmarca este plan en la intención del presidente de Illa "de implicarse en la construcción de una España plurinacional y de una Europa de horizonte federal". De hecho, el documento aprobado hoy por el ejecutivo, reconoce Catalunya como una nación "abierta, plural y diversa, que tiene que hacer frente a retos importantes que requieren, para gestionarse de manera exitosa, consensos amplios". "Una Catalunya que se afirma en su voluntad de ser y de convivir, con su propia lengua, el catalán, y con su cultura como columnas vertebrales," dice literalmente el documento aprobado por el ejecutivo socialista.
En la línea del discurso de investidura del nuevo presidente, el redactado recuerda que el Govern tiene que afrontar la "tercera gran transformación desde la transición democrática". "El Govern quiere alcanzar por Catalunya un modelo económico competitivo, justo y sostenible, basado en la innovación y el talento, que favorezca que Catalunya tenga el peso económico que le corresponde", dice el documento, haciendo referencia a la financiación.
Tres ejes y cinco prioridades
El plan establece hasta tres ejes de actuación: El primero, el institucional con un autogobierno efectivo que "disponga de unas instituciones al servicio de todo el mundo" y con cooperación; el segundo, los servicios públicos de calidad, con un "impulso transformador de la sanidad, educación, vivienda y la seguridad"; y, finalmente, el tercero, que se basa en la industrialización verde con el fin de fomentar la transición digital y ecológica.
El texto especifica que estos tres ejes tienen que servir para dar cumplimiento a hasta cinco prioridades: la primera, el ambiental y transformación digital, con el fin de "generar puestos de trabajo de calidad" y reivindicando la investigación y una tecnología que tiene que llegar a todo el país. El segundo, la prioridad social, el feminismo y la igualdad, haciendo mención de la sanidad, educación, seguridad pública y vivienda, incorporando la perspectiva de género.
La tercera prioridad es la que reivindica un modelo económico "próspero, competitivo, equitativo y sostenible". El cuarto es la prioridad de reforma de la Administración y de los servicios públicos a fin de que se adapten con "flexibilidad a los cambios" e "integrante el uso de la inteligencia artificial". Finalmente, el quinto punto es el que habla de la financiación singular, en el cual reivindica "un gobierno que trabaje por la consecución de un sistema de financiación singular que garantice la suficiencia de recursos para hacer frente a las necesidades de la Catalunya de los ocho millones de habitantes".