La nueva vida del Govern de la Generalitat, ahora en el monocolor amarillo de ERC, no está siendo fácil. La oposición ya ha conseguido sacar adelante algunas iniciativas en el Parlament contra el ejecutivo, y los republicanos también han perdido un puñado de votaciones importantes en la cámara, evidenciando así la falta de apoyos. Pero todavía habría podido perder más si no fuera por los retrocesos de último minuto. Y es que hay algunas propuestas que el Govern ni siquiera se ha atrevido a impulsar en la cámara catalana para evitar que lleguen a girarse en la votación y constatar así todavía más el fracaso de los republicanos a la hora de buscar socios parlamentarios.

Este martes, la Mesa del Parlament ha informado de que dos decretos ley del Govern no se incorporarán al orden del día del pleno que tendrá lugar la próxima semana. Concretamente, son una iniciativa para aumentar en 376 millones el actual presupuesto de la Conselleria de Salud, y otra para favorecer la promoción interna en el empleo público y reducir la temporalidad de los funcionarios. El ejecutivo ya confirmó la semana pasada que tenía las esperanzas que ahora sí que podría aprobarlas en el Parlament, pero se ha visto obligado a guardarlas de nuevo en el cajón hasta que las perspectivas sean mejores. El próximo pleno no se celebrará hasta la semana del 12 de diciembre, cuando será casi imperativo que se apruebe antes de finalizar el año.

Tanto el PSC como los comuns han sido críticos con el Govern por su manera de actuar, pero también han señalado que todo evidencia su fracaso a la hora de llegar a acuerdos. "Estos decretos ley de los cuales abusan de manera muy repetida no se han incorporado", ha ironizado la portavoz socialista Alícia Romero, añadiendo que parece que no tienen otras propuestas ni proyectos de ley más allá de los decretos. Y la líder de los comuns, Jéssica Albiach, todavía ha estado más contundente, avisando Pere Aragonès y los republicanos de que tienen que "negociar" las medidas antes de llevarlas al pleno. "Es un episodio más de la falta de humildad de este Govern", ha lanzado.

Los presupuestos, en punto muerto

Romero también ha avisado de que el PSC votará en contra de los presupuestos si el Govern no cierra una negociación con ellos antes de tramitarlos en el Parlament. La portavoz ha reclamado a Pere Aragonès que "acelere" la negociación para tener unas cuentas el año que viene, aunque no sean vigentes el 1 de enero. "Si nos llaman hoy para esta tarde, allí estaremos", se ha comprometido. En cambio, ha advertido de que el ejecutivo no hace falta que los espere si registra el proyecto sin haberlo "cerrado" con ellos. Por su parte, los comuns ven con "enorme preocupación" que los presupuestos del Govern sean en gran parte los que elaboró el exconseller de Economía Jaume Giró. "ERC tiene que dejar de mirar Junts por el retrovisor", ha advertido Albiach. "Si lo que quiere hacer Aragonès es insistir en los presupuestos de Junts y de Giró, le desearemos suerte y aciertos, pero con nosotros no podrán contar".