Después de que el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) haya obligado a la Generalitat a empezar a vacunar a los policías españoles en un plazo de 10 días, el Govern y la Moncloa siguen acusándose mutuamente de todo.

La decisión del tribunal ha provocado que la delegada del Gobierno en Catalunya, Teresa Cunillera, ya haya enviado una carta a la consellera de Salut, Alba Vergés, para ponerse a su disposición con el fin de vacunar a los policías.

En la misiva —a la cual ha tenido acceso ElNacional.cat— Cunillera vuelve a poner "a la disposición del Departament de Salut la colaboración necesaria para que la vacunación de los efectivos de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado destinados a Catalunya pueda llevarse a cabo lo más pronto posible".

La delegada del Gobierno, Teresa Cunillera, ya ha enviado una carta a Salut / Foto: ACN

"Tal y como hemos hecho desde el principio, te reitero la máxima disponibilidad por parte de esta Delegación de Gobierno", concluye la carta, la cual todavía no ha sido contestada por la conselleria de Alba Vergés, según han asegurado desde la delegación a este diario.

La defensa del Govern

La decisión del tribunal ha indignado al secretario de Salut Pública, Josep Maria Argimón, que en la rueda de prensa de ayer concluyó que la vacunación de los agentes españoles iría en detrimento de la inmunización de los mayores de 70 años.

Argimon, además, atribuyó el retraso a la demora en recibir las listas de agentes: "Parece que llegó tarde", dijo. También alegó los cambios con el suministro de AstraZeneca —que pasó a ser para mayores de 60 años—.

El doctor Argimon excusó al Govern sobre el retraso en la vacunación de policías españoles / Foto: ACN

También el conseller de Interior, Miquel Sàmper, sostuvo el fin de semana pasado que cuando empezó este proceso de vacunación se detectó "un problema en el censo" de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil destinados a Catalunya.

No obstante, desde la delegación del Gobierno han negado demoras en la entrega de las listas y han acusado a la Generalitat de ir aplazando el proceso hasta la llegada de principios de abril, cuando se concluyó que era mejor no administrar la vacuna británica a menores de 60 años a raíz de los casos de trombosis aparecidos en varios países de Europa.

Los agentes, contra Argimon

Las explicaciones de Argimon han indignado a algunos de los sindicatos policiales españoles. El Sindicato Unificado de Policia (SUP) ha lanzado un comunicado en que pide al secretario de Salut Pública que se retracte por "fomentar un enfrentamiento ficticio" entre agentes y ciudadanos.

El SUP cree que las declaraciones de Argimon están "cargadas de sectarismo y buscan encubrir la nefasta campaña de vacunación" del Govern recordando que sólo el 10% de los agentes españoles en Catalunya han sido vacunados. Ciertamente, esta cifra contrasta con la casi plena inmunización de los Mossos, confirmada a este diario por el Sindicato Autónomo de la Policía (SAP).

Una agente de los Mossos es vacunada / Foto: Europa Press

Por otra parte, el sindicato Jucil ha calificado el discurso de Argimon de "sesgado" y "malintencionado" con "el único propósito de señalar y acusar a los agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil de su gestión discriminatoria de la vacunación contra la Covid-19, que demuestra el sectarismo del gobierno catalán".