A las puertas de una campaña electoral, el Govern ha cerrado esta mañana un acuerdo con los sindicatos de la función pública para recuperar en tres años la parte pendiente de la paga extra del 2012. De momento, los funcionarios sólo han recuperado un 25% de la paga que se les recortó, por lo tanto, todavía no han recuperado el 75% del total.
El Ejecutivo de Puigdemont ha acordado, atendiendo una petición del Parlament, que este 2016, como máximo en noviembre, se devuelva a los trabajadores públicos de la administración el 20% de este pendiente, lo que supone 148 millones de euros para las arcas de la Generalitat.
Mientras tanto, para el 2017, los funcionarios recuperarán el 35% y para el año siguiente otro 20%. Ha sido la consellera de Governació, Meritxell Borràs, la encargada de anunciar este acuerdo "positivo" en los pasillos del Parlament. Borràs asegura que "hay satisfacción" por parte de todos los actores. La consellera ha remarcado que el Govern "está haciendo su trabajo" y ha celebrado que por fin se pueda hacer retorno "del derecho de los trabajadores".