No hay cambios en el posicionamiento del Govern en el caso del espolio del Palau de la Música. El Govern ha analizado hoy la polémica por la decisión del Consorcio del palau, con el voto de la conselleria de Cultura, de desestimar incluir la acusación contra Convergència. Después de la tormenta que ayer provocó este tema, la consellera de Presidencia, Neus Munté, ha comparecido ante la prensa con un acuerdo "unánime" en que el ejecutivo deja claro que, una vez conocida la sentencia, "reclamará hasta el último euro y ante quien sea, si ha habido perjuicios para el interés general". De este acuerdo se desprende que el Govern no cambiará el posicionamiento que había adoptado y no tomará la decisión de actuar contra CDC hasta que no haya sentencia en el caso.
El Consell Executiu ha abordado este tema después de que los portavoces de ERC y PDeCAT cruzaron reproches a lo largo del lunes en torno al posicionamiento expuesto por el conseller de Cultura, Santi Vila. Los republicanos mostraron el descontento por la decisión de dejar a Convergència fuera de la acusación y reprocharon a Vila que esta opinión no había sido consensuada dentro del ejecutivo. El portavoz de partido, Sergi Sabrià, anunció que los consellers republicanos plantearían este tema en la reunión de hoy del gabinete.
El Govern en la reunión de este mediodía ha abordado el debate sobre este tema y ha concluido que se mantendría el parecer expresado ante el Consorcio del Palau. La consellera ha explicado que en el acuerdo unánime cerrado hoy, el Govern se muestra "totalmente en contra" de la petición de rebaja de penas que formulará al fiscal –"me parece vergonzosa", ha reprochado-; el ejecutivo no se opondrá a peticiones del fiscal en relación a otras personas; y desde el Patronato del Palau se seguirá haciendo "todo lo necesario para recuperar el dinero que corresponde al Consorcio y para defender activamente sus intereses". "El Govern considera que es su deber una vez conocida la sentencia, y por lo tanto, acreditados los hechos, reclamar hasta el último euro y ante quién sea, si ha habido perjuicios para el interés general," ha subrayado.
Esta ha sido la conclusión de la reunión y la consellera no se ha movido ni un milímetro de la literalidad del guión acordado aunque se le ha requerido repetidamente aclaraciones sobre la traducción práctica de este acuerdo unánime. Igualmente ha evitado entrar a valorar si de todo se concluía que el ejecutivo mantenía la opinión expresada por Villa ante el Consorcio.
Colau: ni transparente ni honesta
Munté, visiblemente irritada, ha cargado contra la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que ayer intervino en la polémica e hizo llegar una carta al president, Carles Puigdemont, para convocar una reunión del Patronato del Consorcio donde volver a debatir este tema.
"Eso requiere máxima transparencia y honestidad y creemos que la actuación de la alcaldesa ni es transparente ni honesta", ha advertido. La consellera ha reprochado que el Govern y el president supieron de la existencia de esta carta a través de un medio de comunicación, mientras que la misiva llegó con posterioridad. "No es un buen comienzo, las cosas no se hacen de esta manera", ha advertido.
La portavoz del Govern ha asegurado que Colau, como vicepresidenta del Consorcio, tiene capacidad para convocar una reunión.