El Govern enmarca la intervención de la Guardia Civil esta mañana en diferentes departamentos de la Generalitat y la petición de la fiscalía de inhabilitación contra el president, Quim Torra, a la dinámica de "represión" del Estado contra el procés independentista, según ha asegurado la consellera de Presidencia, Meritxell Budó.

La Guardia Civil se ha presentado este martes con un requerimiento de información en los departamentos de Presidencia, mientras se celebraba la reunión del Consejo Ejecutivo, así como a la conselleria de Exteriors y en la Intervención General de la Generalitat.

Budó, que ha subrayado que no ha habido ningún registro, ha reprochado que se trataba "de uno de los muchos" requerimientos que se han producido estos dos años, ante los cuales el Govern tiene intención de responder con unidad "para seguir afrontando conjuntamente esta ola de represión que todavía no se ha detenido".

La consellera ha situado también en este procés represivo la petición de la fiscalía de un año y 8 meses de inhabilitación para el president, Quim Torra, por no descolgar el lazo amarillo de la fachada de la Generalitat, a pesar de los requerimientos que se le hicieron llegar. En opinión de Budó, esta petición de pena es un "sinsentido" ante la defensa de Torra de la libertad de expresión.

La petición de información del juzgado número 13 se ha producido esta mañana a raíz de una petición de la Fiscalía y ha sido llevada a cabo por la Guardia Civil en funciones de policía judicial. Al mismo tiempo se ha sabido que la fiscalía pide llevar a juicio al president por un delito de desobediencia, por el cual le reclama una inhabilitación para ejercer cargo público y una multa de 30.000 euros.