El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha reconocido hoy que el Gobierno paga la seguridad del rey emérito de quien, hoy por hoy, se desconoce su paradero, y las autoridades se niegan a desvelar dónde se encuentra.

"Nadie puede olvidar que estamos hablando de quien fue el jefe del Estado en España con lo cual su seguridad es una seguridad que evidentemente concierne el Estado español", ha manifestado hoy Grande-Marlaska en una atención a los medios desde Argelia.

El rey Juan Carlos se encuentra en paradero desconocido.

Ningún detalle sobre su paradero

Sin embargo, el ministro de Interior no ha dado ningún detalle sobre el dispositivo de seguridad. Además, siguiendo los mismos pasos que la Casa Real, el presidente del país, Pedro Sánchez, u otros miembros del ejecutivo español tampoco han dado ni una pista de donde se encuentra Juan Carlos I.

Ahora justo hace una semana que la Casa Real dio a conocer que el rey emérito se había marchado del país a raíz de la publicación de unas informaciones que lo vinculaban a una trama de corrupción para cobrar comisiones a las empresas que habían construido el Ave de la Meca.

El martes pasado se filtró que el emérito estaría en la República Dominicana, una información que más adelante perdió peso. Después, se dijo que el antiguo jefe de estado estaba en Abu Dhabi. Ahora, sin embargo, parece que este fue una parada temporal y, actualmente, se desconoce su paradero.

Investigaciones en curso

Después de que el Tribunal Supremo rechazara aplicar medidas cautelares contra Juan Carlos I para evitar que huyera de España, Òmnium Cultural presentó una petición formal ante el fiscal suizo Yves Bertossa a fin de que cite a declarar como acusado al rey emérito Juan Carlos I ante las autoridades suizas y abran inmediatamente una investigación criminal contra él.

De hecho, en Ginebra ya hay un procedimiento penal abierto bajo el mando del mismo Bertossa en relación con el "presunto blanqueo de sumas millonarias de las que el rey emérito español fue beneficiario".

En paralelo, también la Fiscalía española del Supremo tiene en marcha una investigación sobre Juan Carlos I por las comisiones del AVE en la Meca y Òmnium ha presentado una querella criminal contra el emérito ante el mismo Supremo por presuntos delitos que hacen referencia a la corrupción, como soborno, tráfico de influencias y negociaciones prohibidas a funcionarios; por fraude fiscal y estafa a la hacienda pública y blanqueo de capitales.