Aproximadamente en torno a las 12 del mediodía varios efectivos de la Guardia Civil y la Guardia Urbana han interceptado dos barcas de Greenpeace que se dirigían al Hotel W, donde el presidente de Gobierno, Pedro Sánchez, participaba en la reunión del Cercle d'Economia, según han confirmado fuentes policiales a Europa Press. Otros activistas de la organización han desplegado una pancarta que se podía ver desde una de las salas donde se celebraban.

En las barcas viajaban cuatro y siete personas, y como muestran las imágenes que ha compartido Greenpeace en sus redes sociales llevaban pancartas con el texto "Sánchez, os vigilamos. Recuperación verde y justa".

Los activistas han desplegado todo un operativo por "tierra, mar y aire" para mostrar sus pancartas en que advierten al presidente español que fiscalizarán sus acciones en materia climática. Una cometa ha elevado la pancarta aérea y un grupo de miembros de Greenpeace se han parapetado delante del Hotel W desplegando una pancarta de 15x1,5 metros con el mismo mensaje.

Poco después, la misma organización ha confirmado que la Guardia Urbana ha detenido a dos de sus activistas por desobediencia y atentado contra la autoridad.


"Los fondos no tienen que servir a los intereses de los de siempre para hacer lo de siempre: las grandes empresas de la energía, la aviación, el turismo o el sector agroalimentario no pueden hacerse con todos los fondos, sino que es necesario que se adjudiquen a pequeñas y medianas empresas y a proyectos que busquen la construcción de una sociedad más verde y justa", ha declarado el portavoz de Greenpeace Miguel Ángel Soto.

Greenpeace demanda también más participación efectiva por parte de la sociedad civil en la toma de decisiones, más transparencia en la información y presta especial atención para que "las políticas sociales no sean la moneda de cambio de la recuperación económica y la ocupación".

 

Imagen principal: Activistas de Greenpeace se aproximan en barca al Hotel W para interrumpir el acto de Pedro Sánchez en el Cercle d'Economia / Greenpeace