Nueva derrota del PSOE y de Pedro Sánchez en el Congreso de los Diputados. Y esta vez la responsabilidad ha sido de su socio en el Consejo de Ministros. Sumar se ha abstenido en la tomada en consideración de una proposición de ley del PP que, entre otros objetivos, pretende que la cámara baja tenga que autorizar el envío de armas al extranjero. De esta forma, por 174 votos a favor (del PP, Vox, Podemos y UPN), 144 en contra (del PSOE, ERC, Junts, Bildu y el PNV) y 30 abstenciones (de Sumar, el BNG, Coalición Canaria y José Luis Ábalos), la iniciativa ha superado su primer examen parlamentario y empezará a tramitarse a la Carrera de San Jerónimo. La principal novedad de la norma es que para enviar “material militar a una zona en guerra” el Gobierno tendrá que solicitar una autorización anual al pleno del Congreso con “carácter previo”. Además, introduce que la autorización que ya está vigente hoy en día para “ordenar operaciones en el exterior que no estén directamente relacionadas con la defensa de España o del interés nacional” tendrá una “vigencia de cinco años”. A cambio de la abstención de Sumar, los populares han votado a favor de tramitar una proposición de ley de la formación capitaneada por Yolanda Díaz para poder reclamar al banco cláusulas abusivas en la amortización de la hipoteca. Sin embargo, el aval del PP finalmente no era imprescindible porque Junts la ha apoyado.

En nombre de sumar, Agustín Santos ha esgrimido que lo que aumenta el control “no es la fórmula de cinco años” y ha lamentado que sea una “mera excusa para dividir los partidos que dan apoyo al Gobierno”. “Lo transparente es que se haga anualmente cuando se hace balance de las misiones de paz”, ha argumentado. Y, aunque ha reconocido que es “muy difícil” para el PP “convencer” a los otros partidos de que ahora “quieren más democracia y más transparencia”, su formación ha acabado permitiendo que la proposición de ley se tramite.

Por su parte, Podemos ha votado a favor. Javier Sánchez Serna ha reprochado la Gobierno que “no haya permitido nunca” que el Congreso se pronuncie sobre si quiere “más gasto militar” y ha atribuido esta negativa al “miedo” del PSOE a “aprobar la agenda de la guerra con el PP o incluso con Vox”. “Eso no puede justificar que se le hurte voz en el Congreso”, ha denunciado. “Somos conscientes de que el PP no presenta esta reforma por un compromiso con la paz y el derecho internacional, sino buscando explotar las contradicciones del bloque de investidura, y por la torpeza del PSOE, que ha decidido subordinar la política exterior española a la de la administración Biden”, ha remachado.

La autorización para ordenar operaciones en el exterior tendrá una “vigencia de cinco años”

La iniciativa también añade otras prevenciones relacionadas con la “vigencia de cinco años” que se introduce para la autorización para “operaciones en el exterior que no estén directamente relacionadas con la defensa de España o del interés nacional”. Por una parte, estipula que, antes de que cumplan los cinco años, el ejecutivo tendrá que comparecer en la Comisión de Defensa para “hacer una evaluación, explicar los objetivos alcanzados y determinar aquellos que quedan para cumplir” antes de “solicitar una prórroga de la misión, que podrá tener una extensión máxima de cinco años renovables en las mismas condiciones”. Por otra parte, fija que en la solicitud de autorización de una misión militar al extranjero, el Gobierno tendrá que “determinar el número de efectivos máximo necesario y el material aproximado para llevarla a término”. Asimismo, establece que el ministro de Defensa tendrá que comparecer en la Comisión de Defensa de forma “exclusiva y monográfica” para “informar de la evolución de las misiones en el exterior autorizadas” por la cámara baja.