Nueva acción del grupo independentista Acció per la Independència, ahora en Santa Maria del Collell (Sant Ferriol, la Garrotxa). Según han informado a través de su canal de Telegram, el grupo ha destrozado la madrugada de este miércoles un conjunto monumental dedicado a 48 presos falangistas ejecutados en enero de 1939.
El monumento, formado por una cruz y un monolito, ha sido hecho añicos. Los activistas independentistas han hecho caer los dos elementos, han destrozado las placas conmemorativas e, incluso, han acabado de rematarlo con una taladradora.
Anunciamos un nuevo sabotaje: el conjunto monumental (monolito y cruz) cerca de Santa Maria del Collell, en la Garrotxa, en homenaje a "48 caídos miedo Dios y miedo España".
— Acción Por|Para la Independencia (@AccioXIndepe) July 22, 2021
¡Y todavía habrá més.#ViscaLaTerra! pic.twitter.com/uN9BPtewL7
Inspiración para Cercas
El monumento estaba dedicado a 48 soldados falangistas que fueron ejecutados por el Servicio de Investigación Militar del ejército republicano e inspiraron al escritor Javier Cercas para su novela Soldados de Salamina (Tusquets Editores).
Y es que, de hecho, la novela se centra en Rafael Sánchez Mazas, fundador de la Falange y uno de los únicos supervivientes de la ejecución que acabó con la vida de los 48 presos fascistas. Cercas conoció a su hijo, el también escritor Rafael Sánchez Ferlosio, cuando este fue a hacer unas charlas a la Universidad de Girona, donde trabajaba el mismo Cercas.
Este se fascinó con la historia de Sánchez Mazas, y acabó decidiéndose a publicar la novela después de que el periodista Miquel Aguirre, estudioso de la guerra civil española, contactara con él y le presentara a un segundo superviviente del fusilamiento: Jesús Pascual Aguilar, autor del libro Yo fui asesinado por los rojos. "Hoy se ha escrito el último capítulo con la destrucción del conjunto monumental", han sentenciado los activistas.
Cuarta acción
Esta es la cuarta acción consecutiva que lleva a cabo el grupo, después de que también destrozaran un monolito en Albons (Baix Empordà), otro en Canet d'Adri (Gironès) e irrumpieran en la cripta de los requetés de Montserrat y quemaran algunos de los emblemas franquistas que había.
La organización, que se constituyó el pasado 23 de abril, aseguró que esta es la única vía para "decidir con plena libertad los cambios políticos, sociales y culturales que permitan a Catalunya transitar a una sociedad avanzada".
El grupo, que ya ha adelantado que su campaña de sabotajes sigue, no tiene caras visibles y, de hecho, se reivindica como una organización anónima, transversal y unitaria.