La presunta trama de corrupción en la cual está implicado el asesor de Ábalos, Koldo García, habría contado con la ayuda de un mando de la Guardia Civil en activo. Los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil detuvieron este martes al subteniente del cuerpo, José Luis Rodríguez, que estuvo destinado en el ministerio de Transportes dirigido por José Luís Ábalos. Los investigadores consideran que es "una pieza clave en la gestión de los contratos investigados", que sumaron casi 53 millones de euros de dinero público para material sanitario en plena pandemia de la covid, y por la cual los implicados habrían cobrado comisiones ilegales. Después de tomarle declaración, quedó en libertad, pero consta como investigado en la causa que se sigue en el juzgado de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional por delitos de tráfico de influencias, soborno, blanqueo de capitales y organización criminal.
Relación con Koldo García
La Fiscalía Anticorrupción, en su querella, otorga una importante relevancia a la relación existente entre el suboficial —ahora en reserva— y Koldo García. Incluso, después dejar el ministerio y pasar en la reserva, el policía "tendría influencia sobre personal vinculado al Ministerio de Transportes y, en particular, sobre los entes que adjudicaron los contratos investigados", es decir, Puertos del Estado y Adif. Las investigaciones elaboradas por Anticorrupción y el UCO ha permitido determinar que parte de las comisiones que obtuvo Koldo García y los empresarios investigados, Víctor Gonzalo de Aldama y Juan Carlos Cueto Martín, se destinaron a iniciar un negocio de pizarras. En este sentido, los investigadores vinculan al subteniente con el negocio y con el empresario Cueto. El policía llevaba un coche a nombre de una sociedad del empresario que formaba parte de un grupo que consultaba los movimientos a Cueto.
Cueto era el que lideraba el entramado de empresas que se vieron beneficiadas de los 53 millones de euros de los contratos públicos y el subteniente trabajaba de manera secreta para él. La empresa Soluciones de Gestión, cuyos amos|dueños son los empresarios Iñigo Rotaeche y Luis Presa Medina —detenidos por la trama y posteriormente, puestos en libertad— recibió más de 32 millones de euros en adjudicaciones por parte del ministerio que lideraba Ábalos. Además, Koldo García formaba parte del Consejo de la empresa. La Fiscalía apunta que "la vinculación observada entre Koldo García Izaguirre y José Luis Rodríguez García conecta directa el nivel más elevado de la gestión de los contratos objeto de la investigación, con una de las sociedades en las cuales se ha invertido parte de los beneficios". Y añade, que la vinculación entre "la adjudicación de los contratos e inversión obtenida de estos, unido al incremento patrimonial del entorno de Koldo García Izaguirre —hasta 1,5 millones de euros—, revela esta relación personal entre las dos personas como de máxima importancia".
Vigilancia durante meses
Los agentes de la OCU estuvieron vigilando a su compañero durante meses, según relata elDiario.es. Durante su investigación, identifican un viaje del empresario situado al frente de la trama, Juan Carlos Cueto, en compañía del Guardia Civil en Barco de Valdeorras, en Ourense, donde está la explotación de pizarra que alimenta al negocio que formaron con las comisiones de los contratos. Solo 10 días antes de las detenciones, es decir, el 10 de febrero, Koldo y el Guardia Civil comieron juntos en un restaurante de Madrid. Los dos investigados se dieron cuenta de que en una mesa del lado había varios agentes de la UCO camuflados escuchando su conversación. Los agentes informaron de que el subteniente Rodríguez sabía que Cueto había obtenido 20 millones de euros en comisiones por los contratos del material sanitario.