El Gobierno, liderado por el recientemente investido Pedro Sánchez, y el gobierno de la Comunidad de Madrid de Isabel Díaz Ayuso no tienen buena sintonía. Este lunes la Comunidad de Madrid ha atacado frontalmente al ejecutivo central por no haber invitado a Ayuso al estreno de la nueva línea de AVE que une Madrid y Asturias. El gobierno de Isabel Díaz Ayuso ha expresado su descontento ante la ausencia de invitación para la presidenta de la comunidad en la inauguración de esta línea de alta velocidad que contará con la presencia del Rey Felipe VI y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Este acontecimiento, que marca el primer trayecto entre Madrid y Oviedo, se llevará a cabo este miércoles y ha generado tensiones políticas a causa de la omisión de la líder madrileña en la lista de invitados.
Fuentes del equipo de la presidenta Díaz Ayuso han señalado que la ausencia de invitación es responsabilidad directa del presidente Pedro Sánchez, a quien acusan personalmente de vetarla. Califican este hecho como un "grave error del Gobierno que tendrá sus consecuencias" y destacan que "el muro" creado por Sánchez es simplemente una "tapia carcomida". En respuesta a esta exclusión, el gobierno regional de Madrid ha anunciado que adoptará una postura de reciprocidad y no invitará al gobierno central a los acontecimientos que organicen. "Golpe por golpe", subrayan, enfatizando la tensión política que rodea a esta situación y la mala sintonía entre los dos ejecutivos.
Desde el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, encargado del acto, han respondido a las críticas destacando que las invitaciones a las inauguraciones se extienden a los presidentes de las comunidades autónomas donde se inaugura una infraestructura. En este caso, argumentan que el tramo inaugurado conecta Castilla y León con Asturias, lo cual justifica la ausencia de la Comunidad de Madrid a la lista de invitados. Además, se señala que este criterio se ha aplicado consistentemente en inauguraciones anteriores en otras regiones del estado español. La polémica en torno a esta inauguración refleja las tensiones políticas entre el gobierno central y la Comunidad de Madrid, añadiendo un capítulo más a las disputas entre las dos administraciones.
El precedente: Ayuso impidió al ministro Bolaños acceder a la tribuna del desfile del dos de mayo en Madrid
Las tensiones por choques de protocolo entre el gobierno de la Comunidad de Madrid y el gobierno central no son nuevas. El pasado 2 de mayo, día de la Comunidad de Madrid, el equipo de protocolo del gobierno regional, que preside Isabel Díaz Ayuso (PP), impidió el acceso del ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, a la tribuna principal del desfile que presidió Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la comunidad madrileña. El incidente, ocurrido a pie de escalera y con dos empleadas de la Administración regional, cortándole el paso al ministro del gobierno de Pedro Sánchez, marcó un antes y un después en la escalada de tensión entre el ejecutivo liderado por Pedro Sánchez y el gobierno regional de Ayuso. Este lunes, el nuevo incidente y las acusaciones cruzadas por la no invitación a Ayuso al estreno del AVE ha reavivado estas viejas heridas.