Cada día que pasa, la división en Ciudadanos se intensifica y las voces críticas se multiplican. Después de que este viernes estallara todo con el anuncio de Edmundo Bal de competir contra Inés Arrimadas por el liderazgo del partido —concretamente, se postulará como portavoz en la nueva estructura bicéfala de la dirección de Cs y, de hecho, la persona que ocupe este cargo será el candidato a las próximas elecciones generales—, el incendio, lejos de apagarse, gana fuerza. Begoña Villacís, vicealcaldesa de Madrid y uno de los principales activos de Cs, sopesa no presentarse bajo el paraguas de la marca naranja a las próximas elecciones madrileñas —o con el nuevo nombre que adopte el partido después del proceso de refundación— si Bal se impone en las primarias. De hecho, según explica El Mundo, la política madrileña podría considerar incluso la posibilidad de marcharse del partido.
Las desavenencias de Villacís con Bal tienen que ver, principalmente, con el hecho de que el segundo apostara por votar a favor de la ley del 'solo sí es sí', coincidiendo con la baja por maternidad de Inés Arrimadas. Miembros de la formación naranja también sostienen que el flamante candidato a liderar Cs también sería partidario de permitir la tramitación de la ley trans que promueve el Ministerio de Igualdad —materia en que PSOE y Unidas Podemos no se ponen de acuerdo—. Todo hace que la vicealcaldesa de Madrid vea a Edmundo Bal como una persona "demasiado progresista" y "alejada del liberalismo". En esta línea, algunos recuerdan su candidatura fallida a las elecciones a la Comunidad de Madrid: el partido no consiguió representación en la Asamblea. Ante todo, Villacís sostiene que la mejor solución es una candidatura "unitaria y de consenso" que no sea liderada ni por Arrimadas ni por Bal. Ella misma rehúsa, por ahora, optar al liderazgo del partido, como también se han descartado José Ramón Bauzá (eurodiputado) y Francisco Igea (líder de Cs en Castilla y León).
"Toda la ejecutiva está caduca"
Las voces que se oponen a que Inés Arrimadas siga encabezando Ciudadanos o bien que sea el actual número dos de la formación, Edmundo Bal, van a más. La plataforma Somos Ciudadanos, que agrupa a los críticos, considera que toda la ejecutiva actual "está caduca" y que, en consecuencia, ninguno de ellos representa "la solución para motivar las bases y el electorado". "Han perdido toda la credibilidad interna y externa", destacan en el comunicado firmado por el portavoz de esta plataforma, Sergio García. "Si tuvieran un mínimo de compromiso con la militancia, se apartarían e irían a hacer un relevo sosegado y acordado", defienden, y alertan de que "la actual dirección se está peleando, por puro orgullo de no haberlo hecho antes, para ser los que entierren Cs". Para Somos Ciudadanos, "Inés, Edmundo y toda la dirección han vuelto a cometer un error garrafal que nos lastrará hacia la desaparición, y no será porque no se lo hayamos dicho".