"Cuando [el Govern] abandone los planes para la independencia, podremos hablar". Así de claro y tajante se ha mostrado el ministro de economía, Luis de Guindos, en una entrevista en el Financial Times hecha después de que la Guardia Civil empezara a entrar en diferentes departamentos de la Generalitat y detener altos cargos del Govern; y así lo ha querido destacar especialmente el diario citado, que no se acaba de creer sus palabras.
De Guindos ha querido enviar un mensaje contundente al president Carles Puigdemont y a su ejecutivo: ofrecerá una mejora de la financiación de Catalunya a cambio que se olviden del referéndum del 1-O. Ahora bien. Parece ser que el ministro de economía no cree que Catalunya necesite mejorar su financiación porque, desde su punto de vista, "ya tiene un buen trato de autonomía"; pero, aun así, se ha mostrado muy dispuesto a negociar tanto la financiación como "otras cosas". Eso sí, siempre dentro del marco constitucional, y justificándose que si no se quiso negociar con el expresidente Artur Mas en 2012 era porque España estaba en crisis.
Pero rápidament, De Guindos ha vuelto al argumento que su gobierno ya tiene como plantilla fija y, justamente por este motivo, ha vuelto a cargar contra el referéndum, que ha definido como "pantomima que no tendrá legitimidad legal", y ha asegurado que Catalunya "no tiene ninguna oportunidad de ser independiente".
El palo y la zanahoria
El Financial Times, sin embargo, no acaba de creerse las palabras de De Guindos y tiene claro que esta es la estrategia del palo y la zanahoria para evitar que Catalunya se marche de España. Precisamente por eso, el diario británico vaticina que si el gobierno español no lo gestiona bien, se puede producir "una crisis constitucional y política a gran escala" durante las próximas semanas.
De hecho, el rotativo recuerda que Puigdemont ya ha advertido que todos los cacheos policiales y las incursiones en diferentes imprentas son el ejemplo que el gobierno de Mariano Rajoy ha suspendido de facto la autonomía de Catalunya e insiste en que el Govern ya avisó que si el 1-O gana el 'sí', declarará la independencia en 48 horas.
Sin embargo, el ejecutivo estatal ha seguido asegurando por activa y por pasiva que no se celebrará el referéndum y ahora intentan hacer comentarios que ayuden a convencer a los catalanes de que no tienen que ir a votar, "aparte de amenazar con multas y prisión", subraya especialmente el diario citado.
1-O y referéndums franquistas
Asumiendo que el 1-O podría haber alguna cosa en la calle, pero nunca un referéndum, De Guindos ha aprovechado la ocasión para decirla todavía mayor y ha comparado la cita con las urnas del 1-O con los referéndums de Franco bajo el argumento que "no eran democráticos" y que eso "es burlarse de la ley".
Y no sólo eso. También ha probado hacer campaña del miedo justificante con argumentos económicos que la independencia "sería un suicidio financiero" por Catalunya, que podría sufrir "una caída de la producción del 25 o el 30%" y ha avisado de que los bancos "perderán" el acceso a la liquidez del Banco Central Europeo.
Después de dar un repaso por todos los argumentos de De Guindos, el FT acaba poniendo encima de la mesa que "la saludable región de Catalunya representa una quinta parte de la economía española", así como que la economía catalana "tiene un grosor doméstico similar al de Portugal o Finlandia, motivo por el cual "España tiene intereses al mantener el país integrado".