Iniciativa surrealista. Hazte Oír reclama a la Mesa del Congreso de los Diputados que suspenda a la líder de Junts en la Cámara Baja, Míriam Nogueras, por “despreciar” la bandera de España al negarse a hacer ruedas de prensa frente a la rojigualda. Para ello, la asociación ultracatólica y de extrema derecha ha presentado 39.714 firmas al órgano de gobierno del Congreso escudándose en un precepto del Reglamento referente a la disciplina parlamentaria. “Cualquier persona que en el recinto parlamentario, en sesión o fuera de ella y fuese o no diputado, promoviere desorden grave con su conducta de obra o de palabra, será inmediatamente expulsado. Si se tratare de un diputado, el presidente le suspenderá, además, en el acto en su condición de diputado por plazo de hasta un mes, sin perjuicio de que la Cámara, a propuesta de la Mesa, pueda ampliar o agravar la sanción”, señala el artículo 106.
Es decir, Hazte Oír considera que no hacer una rueda de prensa con la bandera española detrás implica promover un “desorden grave” que merece que la portavoz de Junts en el Congreso sea “inmediatamente” expulsada. “Su deber es el de sancionar a la diputada de empleo y sueldo para que esto no se vuelva a repetir”, sostiene Inma Fernández, portavoz de Hazte Oír. “Reafirmamos nuestro compromiso en la defensa de España, la bandera y lo que importa a los españoles. Hace dos años la propia Nogueras ya insultó a nuestra bandera y solo se le recriminó por carta. Por eso, esta vez hemos hecho lo que debemos hacer: presionar para que esto no quede en nada”, remacha.
¿De dónde viene la polémica con la bandera? Fue la semana pasada cuando Míriam Nogueras convocó una breve atención a los medios de comunicación para valorar el pacto con el PSOE para el reparto de los menores extranjeros no acompañados. La convocó a un micrófono que hay en el patio del Congreso, donde no hay ninguna bandera española de fondo (hace un año ella mismo la apartara de la sala de prensa de la Cámara Baja). Sin embargo, como llovía y hacía frío, Nogueras y los periodistas se desplazaron a un pequeño set de prensa que hay en la Dirección de Comunicación del Congreso y, al ver que también había una bandera española, la diputada juntaire se negó a hacer allí las declaraciones y acabó haciendo un canutazo en medio del pasillo. De hecho, el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, mencionó este episodio en el último pleno en medio de su particular pugna con Junts: “Señora Nogueras, ruedas de prensa con la bandera española, no. Pero meter a sus amigos en empresas españolas, sí”, afirmó.
El incidente con la bandera en febrero de 2023
La primera vez que Míriam Nogueras gesticuló para distanciarse de la bandera española fue en febrero de 2023 en la sala de prensa del Congreso. La líder de Junts en Madrid la apartó justo antes de comparecer ante los medios: subió a la tarima, se dirigió al atril y, poco antes de empezar su discurso, actuó al considerar que la bandera estaba “muy enganchada”. Cuando acabó su discurso, la diputada de Junts justificó haber apartado la bandera alegando que estaba “muy cerca”. “La hemos apartado un poco”, verbalizó más tarde. Cuando le preguntaron por qué dejó la bandera europea donde estaba, defendió que le “representa mucho más”. El día siguiente, el PP pidió a la Mesa del Congreso que escarmentara a Míriam Nogueras. Los populares presentaron una queja formal en la que aseguraban que la diputada de Junts “incumplió” el Reglamento del Congreso y “no respetó los símbolos oficiales”. En el escrito, el PP argumentó que la bandera de España “simboliza la nación y representa los valores constitucionales expresados en la Constitución” y pidió a la Mesa “acordar las resoluciones correspondientes” y “adoptar las medidas oportunas” para que un gesto de este tipo no se vuelva a producir.
Posteriormente, la entonces presidenta del Congreso, Meritxell Batet, amenazó por carta a Nogueras para que no volviera a tocar la bandera española. La advirtió que tomaría medidas si volvía a suceder alguna cosa similar, le pidió “respetar el orden, la cortesía y la disciplina parlamentaria” y reprobó un gesto que consideró que fue una “ofensa a un símbolo nacional” y una “inaceptable falta de respeto a la institución”. “Exigir que se abstenga en el futuro de volver a actuar de esta manera, advirtiéndole de que, en caso contrario, esta Presidencia adoptará las medidas necesarias para garantizar el orden en el recinto del Congreso, en el ejercicio de las facultades disciplinarias y de policía que le confiere la Constitución y el Reglamento”, le avisó.