Barcelona ha exhibido este jueves unidad institucional y su potencial económico, científico y empresarial para dejar claro que está preparada para seguir siendo la sede del Mobile World Congress después de un 2017 que ha estado "complicado", en palabras de su alcaldesa, Ada Colau.
En un acto organizado en el Salón de Cien del Ayuntamiento bajo el lema "Barcelona, Always Connected" (Barcelona, siempre conectada), representantes del gobierno español, de las instituciones catalanas, del mundo académico, científico, deportivo y también de la industria, encabezada por el presidente ejecutivo de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, han subrayado la importancia de presente y de futuro del MWC para la ciudad y para toda España.
Después de un 2017 marcado por la inestabilidad política en Catalunya y en parte por los atentados terroristas de agosto, el acto se ha convertido en una reivindicación de Barcelona como capital del 5G y en una sucesión de muestras de agradecimiento a la GSMA, la asociación organizadora del Congreso Mundial, por|para la confianza depositada en Barcelona.
Optimismo
Ha habido una gran expresión de optimismo en las puertas de la nueva edición, después de un año complicado por Barcelona, a raíz de los atentados del pasado 17 de agosto. El presidente del GSMA, John Hoffman, ha animado a superar el terrible episodio y a impulsar la ciudad con el acontecimiento mundial. La principal cara visible de la organización así lo ha expresado en un acto al Ayuntamiento de Barcelona, con la alcaldesa Ada Colau como anfitriona.
Colau, mantiene su apuesta para convertir la ciudad en la capital del 5G para impulsar "un cambio de paradigma" en la sociedad. Colau considera que Barcelona está "muy bien situada" para hacerlo realidad.