El acto institucional que ha puesto punto final a la Diada Nacional ha sido una producción artística en homenaje a Pau Casals en conmemoración de los 50 años del discurso por la paz que el violoncelista hizo en la sede de las Naciones Unidas.
El 24 de octubre de 1971 estrenó el Himno de las Naciones Unidas delante la Asamblea General de la ONU en Nueva York, ocasión en que el secretario general U Thant le entregó la Medalla de la Paz de la institución por "haber consagrado su vida a la verdad, la belleza y la paz, como hombre y como artista".
El acto, que ha tenido lugar ante las cuatro columnas de Montjuïc, ha contado con la dirección artística de la actriz, autora y directora Marta Bayarri y la dirección musical del cantante y compositor Jofre Bardagí y las intervenciones de las actrices Natalia Barrientos y Paula Vicente; el actor Guim Puig; las formaciones musicales Brossa Quartet de Corda, Aurora Bauzà y Pere Jou y el Cor de Noies de l'Orfeó Català; la violoncelista Mariona Camats; los cantantes Elena Gadel, Miss Raisa, Nel·lo C, Cris Juanico, Alba Carmona y Kelly Isaah; los bailarines Belén Cabanes y Andrés Corchero y el Colectivo Liant la Troca y el Coro de Teatro de Banyoles.
'El Cant dels Ocells'
Las actuaciones musicales se han combinado con la lectura de textos del propio Casals, rememorando su vida y su compromiso a favor de la paz y en contra de las dictaduras. Entre otros temas se han interpretado 'Cançó a Mahalta' de Lluís Llach, por Elena Gadel y 'El Cant dels Ocells', por Cris Juanico, Kelly Isasah y Alba Carmona. El acto se ha cerrado con la interpretación del 'Cant dels Segadors' por parte del Cor de Noies de l'Orfeó Català.
Al acto han asistido las principales autoridades del país: el president de la Generalitat, Pere Aragonés, la presidenta del Parlament, Laura Borràs y el vicepresidente Jordi Puigneró. También los miembros del Govern, el jefe de la oposición, Salvador Illa, y los anteriores presidentes de la Generalitat José Montilla y Artur Mas.
Diada post-covid
Esta primera Diada Nacional post-covid ha supuesto el retorno a la calle del independentismo. En la principal movilización de la jornada, la manifestación convocada por la Assemblea Nacional Catalana, se han congregado, según la misma entidad organizadora, unas 400.000 personas -108.000 según la Guàrdia Urbana-, en la que ha sido la manifestación mayor en Europa en esta era post-covid y que ha recorrido el centro de Barcelona, desde la plaza de Urquinaona hasta la estación de França, donde se han hecho los parlamentos.