Tres días después de que abandonara los estudios de la SER, ante las provocaciones de la extrema derecha de Vox, el candidato Pablo Iglesias ha vuelto al programa de Àngels Barceló. Lo ha hecho en el marco de las entrevistas de campaña, después de que los ultras hayan puesto en cuestión las balas que recibieron tanto él como el ministro Fernando Grande Marlaska y María Gámez, directora de la Guardia Civil. Iglesias ha enviado un doble aviso a navegantes. En primer lugar, que "el fascismo es una amenaza para la democracia". En segundo lugar, que "el fascismo forma parte del proyecto de Ayuso".
Tres días después de abandonar el estudio, Pablo Iglesias ha defendido que hizo lo "correcto" abandonando el debate porque Rocío Monasterio se negaba a condenar las amenazas de muerte contra él y su familia. "No se pueden aceptar las cosas que a veces se escuchan", ha defendido el candidato de Unidas Podemos a las elecciones madrileñas, que ha añadido que, desde el viernes pasado, muchos otros abrieron finalmente los ojos. "Cuando dijimos hace dos años alerta antifascista, recibimos muchas críticas, pero el viernes vimos un cambio", se ha felicitado en este sentido. Cree que es "evidente" que ha supuesto un punto de inflexión en la campaña electoral madrileña.
Dicho todo eso, el exvicepresidente español ha recordado cómo Isabel Díaz Ayuso está dando espacio a la extrema derecha de Vox y comprando una parte de su discurso. En esta línea, ha advertido que "el fascismo forma parte del programa de Ayuso" y que "hay veces que Ayuso parece una candidata más de ultraderecha que la misma Monasterio". El líder de Podemos ha instado a combatir la extrema derecha, también desde los medios de comunicación: "Hay que desmontar lo que dice la ultraderecha. La clave es no tolerar como normales determinadas ideas. La mentira no puede tener el mismo peso que las cosas que son verdad".
Más allá de esta cuestión, Pablo Iglesias ha defendido que, después de las elecciones del 4 de mayo, el PSOE y Unidas Podemos podrán replicar la fórmula de coalición de La Moncloa. En los últimos días, desde el debate de Telemadrid, ha observado un cambio de estrategia del socialista Ángel Gabilondo, que inicialmente quería pescar votantes de Ciudadanos.
Amenazas de muerte
Concretamente, la carta a Pablo Iglesias decía lo siguiente: "Pablo Iglesias Turrión, has dejado morir a nuestros padres y abuelos. Tu mujer, tus padres y tú estáis sentenciados a la pena capital. Tu tiempo se agota". Iba acompañada de cuatro balas de 7,62mm. La misiva de Marlaska llevaba referencias a la Policía Nacional y la Guardia Civil: "Tienes diez días para dimitir. El tiempo de reírte de nosotros se ha acabado. Policía Nacional, Guardia Civil. El tiempo lo tienes en contra para los taponazos (como se conocen los tiros en argot policial)". Las cartas están siendo analizadas en la Comisaría General de la Policía Científica, que ve las amenazas "creíbles".