Política social y vivienda. El acceso a la vivienda ha protagonizado la primera intervención del president, Salvador Illa, en el debate de política general. El president ha presentado un paquete de medidas, entre las cuales un programa de construcción de 50.000 viviendas públicas hasta el 2030, con una inversión de 1.100 millones anuales, es decir, 4.400 millones en los próximos cuatro años. “Ninguna otra comunidad autónoma invierte más que la Generalitat de Catalunya en materia de vivienda”, ha advertido.
Illa ha iniciado el capítulo dedicado a la vivienda con una exposición de datos. Ha advertido que el precio del alquiler se ha incrementado un 114% entre el 2000 y el 2022, mientras que los ingresos medios de la población han crecido un 57%, lo cual significa que los alquileres han aumentado el doble que los ingresos; ha señalado que un 35,3% de la población sufre exclusión residencial; que solo el 2% de vivienda en Catalunya es pública, cuando la media en la UE es del 9,3%; que la media de construcción de vivienda pública es de 1.230 pisos al año, cuando hay más de 90.000 peticiones... “Son datos que dibujan una situación precaria. Es urgente revertirlo”, ha rematado, asegurando que hay que poner todos los recursos públicos y privados para solventar-lo.
Por esta razón, aparte del programa para construir 50.000 viviendas públicas con una inversión de 4.400 millones en los cuatro años de mandato, Illa ha anunciado diferentes propuestas para garantizar que haya más suelo disponible, una mayor rapidez de la ejecución de las obras, más colaboración público-privada, y más ayudas.
Reserva de suelo público
En concreto, ha anunciado la creación de una reserva pública de suelo para ayudar a los municipios con una convocatoria pública anual abierta a agentes públicos y privados, para que pongan a disposición sus solares para la promoción de vivienda de alquiler. Por lo que respecta al Govern, ha anunciado que todo el suelo disponible de la Generalitat pasará a esta reserva pública de suelo. La primera convocatoria tendrá lugar en febrero del 2025, para colectivos con necesidades de acceso.
Con el objetivo de ganar rapidez, ha asegurado que se reducirá en un 50% el tiempo de entrega de las llaves. Hoy, este plazo es de 100 meses desde el inicio de la promoción, y pasará a 50 meses. Esta reducción se realizará estableciendo una licencia básica para iniciar las obras de nueva planta o rehabilitación mientras se tramita la licencia urbanística, que se hará con un sol expediente. Asimismo, se creará un plan piloto de eficacia urbanística, y antes de finales de año se aprobará un decreto de entidades colaboradoras para agilizar licencias urbanísticas municipales, además de facilitar apoyo técnico a los municipios que lo necesiten.
Ayudas
Illa ha adelantado también que la Generalitat otorgará financiaciones blandas a través del ICF a todas las promociones de construcción de vivienda de protección oficial, tanto operadores públicos como privados, para lo cual se destinarán de entrada 500 millones de euros anuales; se creará un fondo público de emancipación dotado de 500 millones para financiar el 20% de los gastos de compra de 11.000 viviendas para jóvenes menores de 35 años, con ayudas a devolver una vez pagada la hipoteca; se destinarán 100 millones durante cinco años a incorporar vivienda libre en el parque de vivienda protegido de forma permanente, y se destinarán 500 millones de euros anuales a 5.000 ayudas para las familias para el pago del alquiler y compra de vivienda de segunda mano para evitar desahucios.
Illa ha advertido que la actual situación de la vivienda es insostenible y es un deber de país cambiarla. “Hago un llamamiento para que todos pasemos de las palabras a los hechos. El Govern, el primero. No vale nexcusas. Todos, ayuntamientos, promotores, propietarios... tenemos que dar un paso adelante”, ha advertido, además de subrayar que la ley de vivienda aprobada en el Congreso establece ya un marco legal y Catalunya ha sido pionera en su aplicación, para declarar municipios tensionados y parar la subida de precios del alquiler. En este sentido, ha reprochado a Junts el bloqueo en el Congreso de la votación de los alquileres de temporada.
Economía y financiación
En el capítulo económico, ha explicado que los presupuestos del Govern para el 2025 serán ambiciosos, que se están negociando con los grupos de la oposición, con ERC y Comuns como aliados prioritarios. No obstante, el tema central en este capítulo ha sido la financiación. En este punto, ha celebrado que ningún responsable de ninguna comunidad autónoma del Estado está en contra de la reforma de la financiación. “Ahí, tenemos que llevar el debate. A los argumentos. No al ruido que algunos quieren y al que no contribuiré”, ha advertido, en referencia, entre otras cosas, a las críticas del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page.
Illa ha reiterado el compromiso del Govern por implementar el acuerdo de financiación cerrado con ERC para su investidura y ha asegurado que se hará en el plazo marcado. “Sé que costará. Sé que será más fácil si contamos con un apoyo amplio de esta Cámara”, ha asegurado. Ha admitido que el acuerdo es ambición y ha asegurado que su gobierno está trabajando con discreción para llevarlo a la práctica. En este punto, la intervención de Illa se ha dirigido también más allá de las paredes del Parlament y ha subrayado que su propuesta de financiación no va contra nadie, que no renuncia a un modelo de solidaridad y busca también la prosperidad de España.
Lengua
Por lo que respecta a la lengua, ha asegurado que “el catalán forma parte de la columna vertebral de Catalunya, tiene que ser elemento clave de progreso, de cohesión y convivencia”; ha admitido que tiene retos y dificultades por resolver; ha recordado el plan de choque puesto en marcha por el ejecutivo, y se ha comprometido a reforzar el Institut d'Estudis Catalans, además de reclamar al hemiciclo un pacto para la defensa del catalán.
Aparte de las propuestas de vivienda, ha insistido en defender una reforma del sistema sanitario, para lo cual ha reclamado el apoyo del los grupos de la cámara. “Si no hacemos reformas, no saldremos adelante”, ha advertido. En relación con Educación, ha recordado los malos resultados de la enseñanza en Catalunya y ha advertido que los profesionales de la enseñanza necesitan más dinero y el apoyo del Parlament para fijar un “rumbo estable en materia educativa”.
Ha insistido en la voluntad del Govern de mejorar el aeropuerto del Prat y ha advertido que es imprescindible para el impulso de la economía catalana; ha reiterado que siguen con el traspaso de las Rodalies y que a finales de año presentarán al ministerio la propuesta de traspaso; además de referirse también a la reforma de la función pública que está impulsando el Govern.