Celebración socialista. El líder del PSC, Salvador Illa, ha aplaudido hoy el acuerdo de su formación, ERC, Junts y los comuns en el Parlament que reconoce por primera vez el castellano como lengua de uso en la escuela y delega a cada centro la decisión, y al mismo tiempo define la lengua catalana como "centro de gravedad" del sistema de educativo. Illa ha demostrado con sus palabras porque ha sido criticada por algunos sectores del independentismo. "Es un acuerdo que defiende el catalán y que respeta y no ataca el castellano", ha indicado. "Pone el catalán como centro de gravedad, pero también el castellano como una lengua de aprendizaje".
La propuesta parte de la base que el catalán es "lengua propia de Catalunya", y "la lengua normalmente utilizada como lengua vehicular y de aprendizaje del sistema educativo". Pero la modificación incorpora por primera vez el castellano también como lengua que se utiliza a la escuela, y establece que serán los centros los que decidan el uso, teniendo en cuenta la situación sociolingüística: "También es usado el castellano en los términos que fijen los proyectos lingüísticos de cada centro, de acuerdo con los criterios que se establecen en el apartado 3". Este apartado 3 establece que para alcanzar el dominio oral y escrito del catalán y el castellano al final de la enseñanza obligatoria, la enseñanza de las lenguas oficiales "tiene que tener garantizada una presencia adecuada" en los currículums y en los proyectos educativos de cada centro. Con esta maniobra, la pelota pasa a manos de los centros y se evita hablar de porcentajes.
Aviso a Junts
Salvador Illa también ha aprovechado una intervención esta mañana para advertir que el acuerdo del catalán está "abierto" a todas las formaciones que quieran incorporarse, y ha pedido "altura de miras". "Ponemos por encima de los intereses del país, de la sociedad catalana, y no ponemos por encima de los intereses cortoplacistas de los partidos", ha advertido. El aviso ha ido dirigido a Junts: los de Carles Puigdemont mantuvieron ayer por la noche una larga reunión del grupo parlamentario, después de que algunos sectores del partido se hayan mostrado molestos por el acuerdo. Junts ha condicionado el apoyo y ha trasladado al resto de grupos la necesidad de encontrar un "imprescindible consenso" con las entidades en defensa de la lengua y la comunidad educativa. Fuentes del partido advierten que el acuerdo descarrilará si no se consigue este consenso. ERC ha acusado a Junts de dinamitar el acuerdo por partidismo.
Para los comuns, blinda el catalán
En esta línea, los comuns también se han querido dirigir explícitamente a Junts. La líder en Catalunya, Jéssica Albiach, ha confiado que los de Carles Puigdemont no abandonarán el acuerdo: "Es importante que estén. Cuanto más transversal sea este acuerdo, más solidez tendrá", ha afirmado. También ha aprovechado para defender con convicción el pacto, afirmando que permite proteger el catalán en las escuelas, a diferencia de lo que manifestaba Salvador Isla. "Permite blindar la inmersión y el catalán en la escuela", mientras que el castellano queda "en la misma posición que tenía: una lengua de aprendizaje, igual que lo es el inglés", ha dicho Albiach. Además, ha celebrado que de este modo se consigue dejar las escuelas "fuera de las zarpas de los jueces".