Castell de Mur es un pequeño pueblo de la comarca del Pallars Jussà que este sábado se ha convertido en noticia porque ha sido el pueblo que Salvador Illa ha escogido para hacer su primera visita municipal como president de la Generalitat. No ha sido un hecho casual que Illa haya querido hacer este gesto que tiene mucho simbolismo, dado que combina elementos territoriales, políticos, patrimoniales y culturales. Castell de Mur es un pequeño pueblo de menos de 180 habitantes, y se interpreta que Illa lo ha escogido como muestra de que el president de la Generalitat lo es de todos los catalanes, vivan en las grandes ciudades, o en pequeños lugares del país como este. El president ha querido mostrar su interés por los municipios más pequeños y rurales de Catalunya y empezar las visitas institucionales en una zona alejada de Barcelona también se puede interpretar como un gesto de descentralización y de atención a todo el territorio catalán.
Recorrido por el conjunto monumental
Pero además, hay otro dato que destaca de la visita: el PSC no tiene ningún concejal en el consistorio, que está formado por tres representantes de Esquerra Republicana y dos de Junts. El alcalde, Miquel López Berga, ha mantenido un encuentro con el president Illa, y los otros miembros del Ayuntamiento, el primer teniente de alcalde, concejal de comunicación, juventud, fiestas y deportes, Darío Albert; el segundo teniente de alcalde y concejal de obras y servicios, Joaquim Burguesa; la concejala de cultura, promoción económica y turismo, Núria Viu, y el concejal de infraestructuras y gestión ambiental, Ramon Salse. La comitiva, a la que se ha sumado el delegado del Govern a l’Alt Pirineu y Aran, Josep Castells, ha recorrido el conjunto monumental que recibe el nombre del pueblo, un castillo medieval, que forma parte del patrimonio histórico y cultural de Catalunya. Después del recorrido por las instalaciones de la fortaleza románica, declarada bien cultural de interés nacional, el president ha firmado el libro de honor.
Visita de Jordi Pujol hace 21 años
El municipio ha recibido con cierta sorpresa la visita del president de la Generalitat. Hacía 21 años que no se producía un hecho similar, desde que el 5 de julio del 2003 Jordi Pujol visitó Castell de Mur cuando era president. El alcalde de Castell de Mur, Miquel López, ha aprovechado la ocasión para trasladar al president las demandas del municipio con relación a las líneas de Muy Alta Tensión (MAT) que se proyectan en el territorio. Según informa la ACN, más allá de la proyección de líneas MAT en la comarca y de comentar cuestiones relacionadas sobre el futuro del parque natural del Montsec que afecta directamente a la zona donde se encuentra Castell de Mur, López también ha destacado la necesidad de los pueblos "pequeños" de tener el apoyo de las instituciones. "Somos ayuntamientos con poco presupuesto y nos hace falta ayuda", ha dicho el alcalde, que se ha mostrado satisfecho por el encuentro y confía en que el nuevo jefe del ejecutivo estudiará sus peticiones. "Ha escuchado y ha tomado nota, pienso que se ha comprometido a poder trabajar. Esperamos que sea así", ha concluido López.