El calendario ya está más definido. El sábado 26 de diciembre llegarán las dosis de la vacuna de Pfizer a España y se distribuirán por todo el territorio. Y el domingo 27 empezará el proceso de vacunación en todo el Estado. Así lo ha garantizado el ministro de Sanidad este viernes, y también ha alertado sobre el "claro cambio de tendencia" en el número de contagios. Por este motivo, ha aplaudido medidas más estrictas como las anunciadas hoy por la Generalitat de Catalunya, que sigue el camino correcto para responder a la alteración de la situación epidemiológica.

En rueda de prensa desde el Palacio de La Moncloa este viernes al mediodía, el titular de Sanidad ha asegurado que la llegada de vacunas "significa el principio del fin, pero no el fin". Ha celebrado como una "muy buena noticia" que la Unión Europea haya adelantado las fechas. En este sentido, ha detallado que Europa repartirá las dosis de Pfizer, las primeras autorizadas, el sábado 26. Entre el sábado y la madrugada del domingo llegarán a cada rincón del Estado y aquel mismo día empezará el proceso de vacunación, el primer día hábil después de la distribución. Ha dejado claro que se repartirá "de forma equitativa" y basándose en el plan de vacunación del Gobierno.

"Todos tenemos ganas de empezar el primer día posible", ha sostenido el ministro Illa. "No queremos esperar ni un solo día", ha insistido. Y ha concluido, para no dejar lugar a dudas: "La vacunación empezará el 27". En todas las comunidades y ciudades autónomas. En los próximos días ya empezarán las citaciones a los primeros pacientes de los grupos prioritarios: personas mayores en residencias y los trabajadores de estos centros.

Aplaude las medidas de la Generalitat

Más allá de las vacunas, Salvador Illa ha querido advertir que la situación es "muy preocupante" con un "cambio de tendencia claro" en el incremento de contagios de coronavirus. En algunas comunidades directamente se ha puesto fin al descenso de casos diagnosticados. Este cambio de tendencia se produjo el 9 de diciembre, todavía sin tener en cuenta los efectos del puente de la Purísima. Por eso ha defendido que "hay que reaccionar de acuerdo con la estrategia que estamos aplicando" y si hay que endurecer las restricciones. Por todo eso, ha expresado su "apoyo" a las medidas que ya se han anunciado, citando el ejemplo de los gobiernos de Catalunya, el País Valencià y Castilla y León.

"Es lo más adecuado y oportuno como reacción a este cambio de tendencia", ha defendido el ministro de Sanidad. También ha hecho un llamamiento a la ciudadanía a "aumentar la prudencia" durante las próximas semanas. "Que no sea que celebrando la Navidad no lleguemos a Reyes", ha advertido.