El primer discurso de Sant Jordi de Salvador Illa como president de la Generalitat ha querido subrayar los valores de diálogo, entendimiento, paz, convivencia y fraternidad frente a la intolerancia. Illa se ha referido a los avances conseguidos por el catalán en las instituciones europeas y ha reiterado la exigencia de un alto el fuego ante las "tragedias del pueblo palestino y ucraniano", además de evocar el legado del Papa Francesc.
El president ha pronunciado su discurso ante la fuente de Sant Jordi del patio Gótico del palacio de la Generalitat. Detrás de él había una bandera con el crespón negro por la muerte del Papa Francesc. De hecho, la muerte del Santo Padre ha sido uno de los primeros puntos que ha abordado, para recordar las muestras de pésame que ha provocado a raíz del "liderazgo moral que ejerció más allá de las creencias religiosas". "Su legado es inmenso, nos recuerda el compromiso ineludible de situar a las personas más vulnerables y el cuidado del planeta en el centro, la solidaridad con personas y la responsabilidad con el medio ambiente. Los dos, valores universales", ha argumentado.
Minorías
Illa ha subrayado que también esta Diada aparece cargada de valores universales; que la leyenda de Sant Jordi y el dragón, recuerda el compromiso de lucha contra desigualdades sociales y que Sant Jordi mártir, a pesar de las órdenes del emperador Diocleciano se negó a perseguir a los cristianos en el siglo IV. "Encontramos, pues, una lección de humanidad hoy tan necesario de recordar en tantas regiones del mundo dónde las minorías sufren la intolerancia", ha remachado.
El president ha asegurado que cada 23 de abril Catalunya muestra al mundo su mejor versión, cívica, dinámica y alegre, afirmando la voluntad de ser y convivir; ha subrayado que este año esta festividad llega en un momento de profundo cambio geopolítico y que Catalunya hace frente a esta situación en un "buen momento", en que la economía crece a buen ritmo y hay vitalidad social y dinamismo cultural, por lo cual el país está reforzando sus fortalezas, los sectores productivos, y el escudo social para afrontar con garantías cualquier escenario de incertidumbre.
Paz y convivencia
En este punto, ha querido hacer valer las razones por las cuales sentir orgullo de celebrar esta Diada, y ha destacado la historia en común que representa Sant Jordi, patrón de Catalunya desde el siglo XV, cuando ya se celebraban ferias de rosas en Barcelona. "Porque compartimos el mismo deseo de paz y convivencia, por eso seguiremos defendiendo estos valores enfrente de los discursos de odio y los que quieren generar confrontación", ha asegurado, para recordar en cuanto esta festividad se celebra en muchos países desde Palestina a Etiopía, por|para lo cual ha instado a no olvidar "el sufrimiento que todavía hoy se vive a Gaza y a tantas ciudades ucranianas".
"Porque formamos parte de Europa y por eso seguiremos defendiéndola con firmeza como espacio de progreso, convivencia y libertad", ha añadido, además de subrayar que Europa disfruta de la democracia, y por eso se seguirá ejerciendo a las instituciones y al día a día.
Catalán
Illa se ha referido en este punto a la lengua, para asegurar que "compartimos nuestra lengua, el catalán, y al mismo tiempo compartimos con otras lenguas de todas partes mundo". En este punto, ha destacado los avances en el reconocimiento del catalán a las instituciones europeas y ha asegurado que el Govern seguirá fomentando su uso a todos los ámbitos sociales.
El president no ha olvidado a su discurso su habitual referencia a la "prosperidad compartida" y a un futuro que ha asegurado que Catalunya quiere vivir con optimismo y esperanza. "Todo eso es Sant Jordi y encarna la sencillez de la rosa y el libro", ha sintetizado.
"Por eso decimos que Sant Jordi es todo el mundo, y por eso este año es tan importante que lo proyectemos más allá de nuestras fronteras, porque el mundo necesita un mensaje de optimismo y de fraternidad", ha asegurado.
Gesto revolucionario
Enfrente de estos valores ha situado aquellos que se vanaglorian de la fuerza del dinero, en referencia implícita al discurso que abandera el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. "Nosotros nos vanagloriamos de regalar rosas, porque no hay un gesto más revolucionario contra odio que regalar una rosa a quien amamos y también a quien piensa diferente que nosotros. Quizás algunos se vanaglorian de atacar las ciencias, la universidad y el arte; nosotros nos vanagloriamos de regalar libros", ha asegurado Illa que ha enfatizado que regalar un libro es un sí a la creatividad, a los valores humanos, a la democracia y la convivencia, a la diversidad, a la educación, al catalán, a la cultura, a Catalunya y a Europa.
"Sant Jordi es sinónimo de entendimiento y diálogo entre personas, vengamos de donde vengamos, sintamos como sintamos. Y sí a la fraternidad, que desde Catalunya enviamos a Aragón y a tantos municipios de València, como Paiporta o Alcoi, de donde también Sant Jordi es el patrón," ha remachado Illa que ha animado a regalar rosas y libros y a mirar el futuro con esperanza y generosidad.